Star Wars: KOTOR
Blog para los escritos de la mesa dirigida por Marcos (Patán) de "Star Wars - Kights of the Old Republic"
viernes, 21 de septiembre de 2012
Liz: Epílogo
De: Yo
Para: Der <3, Hope, Mandy Sunny, Ariella, Triss T.
Subject: Hola chicos!
¡Hola chicos! Se que estuve desaparecida pero no me extrañen, los quiero pero estuve a full. Estuve pensando cuando podemos juntarnos, podrían darse una vuelta por casa. Hay buena comida, bebida, y diversión. Incluso Ari podrías cantarte algo, y reeditamos nuestra dupla :D
¡Los quiero mucho y espero novedades de uds, les mando algunas cosas de mi agenda que escribí para que sepan en que ando!
La vuelta a casa se antojó complicada. Algunos temas con la nave, y no tenía a Elen a mi lado. Por suerte, Arten todavía manejaba esta clase de cacharros sin problema. Era muy raro volver a estar a su lado. Mis charlas con él fueron, como decirlo, extrañas. Parece que había una étapa de su vida que él mismo quería obviar. Traté de confortarlo, pero su mente estaba cerrada a mí y no me dejaba escrutarlo. Quería saber qué había pasado. Pero hay cosas que mejor dejarlas así.
Cuando vi Lucazec de lejos sentí la misma tristeza que cuando me fuí. Todo me recordaba a Tessa. Arten me vio derramar alguna lágrima, y lloró a mi lado. Él también se había encariñado con Lucazec.
Apenas pisé tierra de vuelta, mis lágrimas trocaron a alegría. Hogar seguía siendo un lugar hermoso, lleno de verde, aire puro y flores silvestres. La ciudad mostraba algunas trazas de que la tecnología y los signos de los tiempos estaban llegando. Se podían ver algunos deslizadores, mercaderes de otras razas y algunos atisbos de construcción en metal.
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Los primeros meses fueron de excesivo trabajo. Conseguimos que la matriarca, por nuestro rol de héroes, nos asignara tierras para ubicar la Academia. En un principio eramos Arten y yo, más algunas chicas elegidas del Culto a la Corriente Blanca que se nos habían unido. Tuvimos una profunda discusión con la gente del Culto, pero mi rol como sacerdotisa sirvió para aminorar las tensiones. Es que tampoco hay tantos usuarios de la Fuerza, y tener que compartirlo entre dos entidades fue, digamos, motivo de tensión. Arten completó la nómina cuando se tomó unos meses para rastrear en sistemas aledaños. Vino con algunos aliens, principalmente twileks. Con el tiempo los twileks se convertirían en una de las razas más populosas de Lucazec, y realmente nadie se opuso mucho a ello (en especial las mujeres de nuestra patria, devotas de las perfectas figuras de las chicas twileks y sus llamativos colores). Al poco tiempo de abierta la Academia, se nos unió Ididen Alrai, la caballero jedi que se "había vendido" a los siths. A ella la cargaron de demasiadas expectativas desde que era pequeña y si bien arrancó con todo, se fue quedando y le jugó en contra. Las expectativas en su éxito como jedi fueron demasiado exigentes, y ella desbarrancó. Por suerte, pudo cambiar de parecer antes de pasarse al lado oscuro, y está aquí para ganarse su oportunidad. Espero mucho de ella pero no se lo voy a decir, no quiero sobrecargarla. Le va a venir bien encontrar su camino en una academia lejana sin muchas pretensiones ni un Consejo que la vuelva loca. Ididen resultó ser una excelente jedi y lo que es mejor, es todavía una mejor maestra. Debe ser que tanto la presionaron cuando era chica que ahora se toma todo el tiempo que necesita para llevar por un buen sendero a los padawans.
Con la iniciativa de la Academia tuve que poner la mayor cantidad de plata que gané con mis amigos del Exchange. Igual todavía tengo crédito con Vito... si la Orden sabe en lo que estoy no sé si Soslan seguiría enviándome plata, pero todavía algo me manda. Es un amor. Me encantaría que viniera a Lucazec, pero sé que esta muy atareado en Dantooine. Atton en cambio le manda los pedidos a Arten... Atton rata, te olvidaste de los años de servicio. No importa. Me debo a la Academia.
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Lo más difícil fue poner la placa con el nombre de Tessa en la Academia. "Academia jedi de Lucazec: en memoria de la caballero Tessa, por parte de su esposa Kalissa y su amigo Arten" reza la placa. Arten estuvo mucho encima mío esos días. Terminamos mal, como era de esperar, en la cama, ahogando las penas de tristeza con sexo y promesas de amor eterno que ninguno de los dos creíamos. Por suerte yo ya no tenía 18 años así que me dediqué a disfrutar el momento y ya. Aparte, él no quiere compromiso de ningún tipo y los echani son poligamos, así que la idea de establecer algo serio con él no corre más. Pero si pinta divertirnos. Y nadie duda del amor que sentimos el uno por el otro. Me da cosa la cantidad de chicas que lo miran con ojos hambrientos. Si supieran que yo las miro con ojos hambrientos a ellas...
Volviendo al tema Lucazec, tengo que decir que no he podido lograr avanzar demasiado. Es decir, la Matriarca se opone a que lleguen muchos extranjeros. Yo le explique que mi idea no es convertir a Lucazec en Taris, sino ser más como Alderaan. Alderaan combina su hermoso ecosistema con tecnología y ciudades de avanzada. Cuesta mucho ponernos de acuerdo, pero en algunas cosas vamos avanzando. Arten se opone a que me meta en política e Idi también. Dicen que no es lo nuestro, pero yo quiero lo mejor para mi planeta. Si vuelven a venir enemigos, quiero que mis hermanas esten preparadas. No podemos pelear con palos y espadas de metal contra naves o rayos laser. Así que he decidido ser más fiel a mi estilo, una construcción sútil y política para de a poco ir logrando mis objetivos. Va a tardar, pero Lucazec va a ser un planeta hermoso y rico como Alderaan.
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Arten a veces me mira cuando vuelvo con alguna chica en un estado de ebriedad total. Se pregunta porque sigo haciendo eso, pese a que le digo que es por diversión. Cree que tengo algún trauma. Es un tierno. Pero no se da cuenta que mi apuesta amorosa no está en el más acá sino en el más allá. Cuando me toque morir, me iré con Tessa. Y recuperaré la parte de mi alma que falta. El mío es un amor a prueba de todo. Yo no le voy a fallar a ella nunca. Podré compartir mi cuerpo pero mi corazón solo será de ella. Aparte que se calle, él está con varias chicas a la vez que lo idolatran como el héroe de guerra que es y nunca le recrimine nada.
Reconozco que me gustaría hincarle el diente a Idi, pero es como Hope, tienen esos prejuicios de que solo le gustan los del sexo opuesto. No puedo creer que se haya quedado con Todrik. Es tan insólito como dedicarse a ver una maratón de hutts. Debe estar muy dotado y ella muy necesitada. Lastima.
La que volvió a casa y me trajo buenos momentos fue Alsh. Volvió un rato, se tomó mi vino que estaba guardando para ocasiones especiales, creo que se tiró a Arten (y a mí por caso), pero al menos nos dejo un gran momento. Sigue hermosa y radiante como siempre. Un día nos pusimos las dos a practicar danza tradicional en la plaza principal. Coordinamos la danza en una batalla de cuchillas que mezclaba el sonido que hacían los músicos con el movimiento. Logré cantar algunas cosas en el combate para hacerlo poético, para esos entonces ya estaba la plaza llena viendo el baile/combate. Tras casi una hora de exhibición, cerramos el evento con un beso apasionado (que luego culminaría en alcohol y una cama, pero eso no era público). Fue algo hermoso. Un día le voy a enseñar a Der este baile/combate, así aprende a moverse con más gracia.
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La Academia funciona bien. Ya conseguimos buenos droides de cocina que preparan alimentos sanos, tenemos extensos campos donde prácticar y entrenar y al estar cerca de un río la conexión con la Fuerza/Corriente Clara surge de forma natural. Las chicas y chicos están casi todos enamorados del sable de luz, cosa que Arten maneja a la perfección. Pero ya tengo a varias chicas en el sendero de la ilusión y las trampas, después de todo, son mis trucos favoritos. Hay algunas chicas que ya venían teniendo entrenamiento avanzado en el camino Fallanassi, cuando completen sus estudios de combate básico veré si Idi puede tomar una de padawan. Creo que va siendo hora de que Idi de un paso adelante como cuando Soslan me hizo darlo a mi y tomar a Der de alumno exclusivo.
Se que es algo extraño, pero estoy manteniendo comunicación en buen tono con Lucien Draay. Siempre le voy a agradecer lo que hizo por Arten, y prefiero caerle bien y que me mande a los chicos que encuentra que dejar que los entrene él. Tenemos algunos puntos de acuerdo en ciertas cosas. Después de todo, es un jedi. Y el Consejo considera que ha pagado por su error.
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Sueño demasiado con Tessa. Meditar largas horas en la Fuerza solo me lleva a ella, después de todo, es mi ideal de Luz. En las meditaciones estamos juntas, nos divertimos, hablamos de sueños, de mi vida (aunque ella se niega a contarme del más allá), de proyectos que debería tener, de Arten, de Lucazec, de Derlin, de Hope. Termino la mayoría de mis meditaciones envuelta en lágrimas. Idi y Arten lo saben, pero aún así me piden que siga meditando. Que este tránquila, relajada. Me gustaría que Ariella viniera a dar un show aquí. Todas tenemos muchas hermanas que perdimos en la guerra y sería bueno para todas poder despedirnos de ellas.
Ahhh las hermanas que volvieron, volvieron casi todas. Algunas habían establecido vidas en sus nuevos destinos cuando fueron llevadas por Czerka. Pero las que volvieron pasaron a gozar de un estatus superior: el perfil de supervivientes. Y estan alineadas a mi causa. Muchas quieren que el progreso de la galaxia llegue a Lucazec, así que de a poco voy ganando adeptos.
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Una vez que concluya mi misión de dejar Lucazec y la Academia en perfecto orden, supongo que me alejaré para meditar largas horas en la Fuerza. Tengo necesidad de ir a un planeta que reverbere a Lado Oscuro, solo para poder encontrar la Luz de Tessa en él. No hay mejor foco que ese. Arten dice que es una locura e Idi me mira con sorpresa cada vez que hago pública esta idea. Pero necesito buscar a Tessa. Mi corazón lo dicta. Necesito saber que ella va a estar ahí aún si mi espíritu claudica a la oscuridad.
Una noche hice un intento. Generé mi espada de Fuerza y empecé a atravesarme con ella. Suicidio. Sentí la punzada de la energía sólida que estaba cortando a través de mi abdomen. La sangre manaba sin parar. Escuché su voz. Me frenó. Te esperaré por siempre, me dijo, no hay necesidad de acabar tu vida para llegar a mí.
Arten sintió el dolor y llegó a mi cuarto a sanarme. Creo que quería matarme porque me insultó de lo lindo.
Pero para mí fue una noche perfecta. Ya sé que pase lo que pase, mi Luz va a seguir estando ahí.
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Tengo los planos del ecosistema de Alderaan. Se que lo cuidan celosamente, pero me tome su buen tiempo para robarlos. Después de todo, soy una jedi. Con estos proyectos, Lucazec puede dar el salto que necesita. Solo tengo que encargarme de la Matriarca. Ya veré que hago. Por lo pronto los extraño a todos, ¡menos a Sunny (o Soony) que es un tonto! Espero ir a ver a la nena de Hope. Y explicarle a ese payaso como cuidar a una chica.
Y ver a mi Der... hace mucho que no lo veo.
¡Ya nos juntaremos con unas cervezas frias! ¡Y quizás les presente a mi chica! Se llama Selen Spiral y es sacerdotisa de la Corriente Clara. Aunque la voy a terminar haciendo jedi. Estamos pensando en tener nenas, así que puede que necesitemos donante.... Quizás a Der le interesa...
Selen Spiral:
http://vemoscine.com/wp-content/uploads/2010/07/amanda-seyfried.jpg
Ididen Alrai:
http://ia.media-imdb.com/images/M/MV5BMjA1MjI2NTUyM15BMl5BanBnXkFtZTcwNDg1OTQzMQ@@._V1._SX214_CR0,0,214,314_.jpg
Alsh Cynems:
http://moviecultists.com/wp-content/uploads/2009/10/amber-heard1.jpg
Arten:
http://media.comicvine.com/uploads/0/77/142534-91240-joseph_super.jpg
No encuentro actor que rinda con el pelo blanco largo sin ser albino
lunes, 28 de noviembre de 2011
Hope: Epílogo
-Era mi papá. Se llamaba Frederick y ella era mi mamá, Stella.
-¿Y esta sos vos? Que bonita- me sonrió Ariella.
-Tenía cinco años en esa foto- le sonreí.
Puse el cuadrito en un lugar privilegiado de la "Casa de los Recuerdos" que estaba armando en una de las estancias aledañas a la casa principal. Ariella me estaba ayudando a acomodarlo para que quedara bien.
-¿Y estos señores quiénes son?
-Son mis tíos, los papás de Alex, el bebé es él. Creo que a Derlin le va a gustar ver esta foto, se la voy a mandar.
Usé mi datapad para escanear la foto y se la envié. Enseguida me llegaron varias fotos: una de Derlin sentado en el sillón de Soslan con los pies arriba del escritorio, una de la academia de Taris, había un Derlin pequeño entre los estudiantes y también estaba Liz ahí. La última era de la actualidad, con Liz sentada en el sillón de Soslan y Derlin detrás de ella poniendo cara de mafioso de Exchange. Me reí y le mostré las fotos a Ariella, ella también se rió bastante al verlas, me gustaba estar así con ella. Definitivamente se había convertido en mi hermanita menor.
Entre las cosas que encontré había una túnica de papá, algunos vestidos de mamá, esos iba a llevarlos conmigo, quizás estuvieran pasados de moda, pero aún seguían igual de hermosos a cuando ella los usaba. La túnica de papá la dejé colgada en "la Casa de los Recuerdos" lástima que no tuviera también su sable... Recordé que le había dado el cristal de papá al abuelo, él lo iba a limpiar, no quería volver a manchar más nada con el Lado Oscuro, no quería tampoco volver ahí, ahora sabía que no me servía para nada.
"Para limpiar un cristal la mejor manera es esta"
Abrió su sable sacó uno de los cristales y lo reemplazó por el rojo que yo le di. Después me dio el de color violeta que había sido de su sable.
"¿Me lo das?"
"Sí"
"Entonces quedate vos con el de papá"
A él no parecía importarle de quién fuera el cristal pero noté cierta nostalgia en sus ojos cuando le conté de quién era. Decidí que era mejor que él se lo quedara.
Ariella me extendió una foto de mamá y papá, se estaban mirando y sonreían, parecía una foto sacada en alguna fiesta del pueblo. Sabía que yo no había nacido todavía porque ellos se veían mucho más jóvenes que en las fotos donde estaba yo.
-Se veían muy felices...- dijo Ariella.
-Lo eran, lo éramos- corregí.
-Ella tenía tu misma sonrisa, es la misma sonrisa que tenés vos cuando estás con Todrik.
Me reí.
-¿En serio?
-Sí, la misma, sin duda.
Ariella ubicó la foto de mis padres justo debajo de la otra donde estábamos los tres. Debajo de esa foto ubiqué varias más. Una de Liz y yo vestidas para salir a tomar algo el día que llegó a Dantooine, otra entrenando con Alex, otra del recital de Ariella en Dantooine, otra de la reunión que hicimos después en casa...
-Falta una foto de nosotras Ariella, a ver, debe haber una por acá... Esta.
Era una foto que sacamos en el jardín que era de mamá hacía pocos días.
-No tenés fotos con Todrik... a ver, yo tenía una por acá...
Ariella sacó una foto de Todrik y yo besándonos.
-¿Cuándo la sacaste?
-Una vez que Todrik y vos no se estaban dando cuenta- Se empezó a reír- Voy a ponerla acá.
La ubicó al lado de la de mamá y papá.
-¿No vas a colgar ninguna de él?- me preguntó.
-El recuerdo de él lo tengo conmigo- me acerqué y le mostré las dos pulseras idénticas que llevaba una en cada muñeca.
-Siempre me intrigó porque nunca las cambiabas.
-Nunca lo haría.
-¿Dónde están sus fotos?
-Las guardé en el hangar, tengo todas sus cosas ahí. Hay fotos de él en este datapad. Busqué una foto de Clint en su viejo Datapad y se la mostré- ¿No era hermoso?
Ella me sonrió y me dijo:
-Era muy lindo.
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-Ahí viene la chica de Todrik.
Odiaba que murmuraran así ¿qué era eso de 'la chica de'? Yo no soy propiedad de nadie...
-Es un caballero jedi, yo que vos tendría cuidado...
¿Por qué nadie era capaz de llamarme por mi nombre? Ni que fuera tan complicado de pronunciar...
-Tengo nombre, me llamo Hope...
-¡Hope!
Ariella me llamó desde el camarín y salvó de un discurso a los dos guardias de seguridad. Adentro solo estaba ella y la maquilladora.
-Odio que me digan 'la chica de Todrik' el próximo que me diga así va a conocer mi sable...
La maquilladora puso cara de terror o de que pensaba que estaba loca, hasta que sonreí.
Ariella se murió de risa.
-Se van a tener que acostumbrar a que no sos como las demás ¿Qué opinás, el rojo o el blanco?
Me mostró dos vestidos hermosos ambos de diseñadores famosos de ese planeta.
-El blanco me gusta más como te queda
-Usted debería ponerse un vestido algún día también, le sentaría muy bien- comentó la maquilladora de Ariella.
-¿Por qué todos se empeñan en tratarme de usted?
La maquilladora me volvió a mirar con cara de terror.
-No te preocupes Eli, ladra pero no muerde.
Me reí mucho del comentario de Ariella.
-Entonces podemos maquillarla también, ¿que opinás Ariella?
-¡Sí!
-Ni se les ocurra...
-¡Dale! Por favor, hacelo por mí hermanita
No podía resistirme mucho a sus demandas cuando me decía hermanita.
-¿Entonces?- insistió la tal Eli.
Ariella parecía muy entusiasmada con la idea y no quise desilusionarla justo antes del show.
-Está bien... pero estoy segura que me voy a arrepentir de haber accedido...
-Eso es porque no conoces a Eli… usá esta gama- le dijo señalando una paleta enorme de sombras de todos los colores imaginables.
Supuestamente la maquilladora era muy famosa, había maquillado a muchas artistas a lo largo de muchos planetas de la galaxia. Creo que estuve como dos horas sentada en el camarín, si no hubiera estado Ariella ahí hubieran sido las dos horas más aburridas de mi vida.
-Listo- sonrió satisfecha viendo el trabajo final.
-Eli creo que esta noche Hope va a ser tu mejor trabajo
Había usado sombras violeta, pero eran colores muy suaves, en los labios había usado un rosa que casi ni se notaba. Aún así en conjunto el trabajo era perfecto, hasta a mí me gustaba como me había quedado.
-Definitivamente, uno de mis mejores trabajos
-¡Vamos a sacarnos una foto!
Le dio el datapad a Eli y ella nos fotografió.
-¿Puedo subirla a mi página?
-Supongo que no hay remedio, voy a tener que acostumbrarme.
Ariella me abrazó y yo le respondí el abrazo.
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-¡Hola tía!
Se notaba que había llegado corriendo por el pasillo, seguramente había subido los 16 pisos corriendo. Todrik le había prohibido usar el ascensor.
-Hola Alex ¿qué haces acá?, hoy te tocaba estar detrás del escenario con Todrik.
-Me mandó a averiguar personalmente si era real lo de la foto, te queda muy lindo.
Me reí, seguramente la mitad de la galaxia ya había visto mi foto. En ese momento me di cuenta de lo mucho que podía influir Ariella en las personas, en especial en los más jóvenes. Claro, por eso siempre era tan responsable, realmente ella sabía que era un modelo a seguir para mucha gente.
-Bueno vamos, hay trabajo que hacer- le puse mi brazo sobre los hombros y fuimos hacia las escaleras.
-¿No podemos usar el ascensor?
-Obvio que no.
El se rio y comenzo a bajar.
-No me culpes por intentarlo. Estoy muy contento de que vuelvas a ser la Hope de antes.
-Soy la misma Hope, solo que ahora no persigo a los siths para matarlos.
-Sí a eso me refería, esa no eras vos
-Puede ser... ¿terminaste el talismán?
-Ya casi lo termino, vamos a necesitar cristales
-Tendrás que buscarlos cuando vayamos a Dantooine, necesito uno para el que estoy construyendo para Ariella
-¿En las cuevas de esos bichos?
-Claro, para eso estas entrenando.
-¿Y para Todrik no vas a armar uno?
-Claro que no, ya le pase los planos, va a tener que armarlo él.
-Eso me recuerda... demasiado tarde...
Cuando llegamos al lobby del hotel los periodistas que esperaban la conferencia de prensa se abalanzaron sobre mí con los micrófonos ¿Solo una foto había conseguido eso? Supuse que esa exposición no iba a gustarle nada al maestro Bao dur... aunque tampoco me importaba demasiado eso.
Al principio me hicieron tantas preguntas que no entendía nada. Alex se paró enfrente mío en actitud protectora.
-Si me hablan todos a la vez no voy a poder responderle a ninguno...
En ese momento me hubiera gustado tener el poder de Liz para poder desaparecerme.
-¿Usted es la nueva guardaespaldas de Ariella?
-Así es.
-¿Cómo consiguió el trabajo? ¿Qué es ella para usted?
-Es mi hermanita.
¿Qué les importaba a ellos por qué lo hacía? Realmente para mí ni siquiera era un trabajo…
-Pero no es su hermana realmente...
Eso era evidente así que no respondí la pregunta.
-¿Usted es un caballero jedi?
Como única respuesta les señalé el sable que colgaba de mi cintura.
-¿Es cierto que usted y Todrik Triss tienen una relación?
-Depende que definas por 'relación'
-¿Qué opina de las anteriores parejas de él?
Otra pregunta intrascendente…
-Una de ellas es una de mis amigas, de las demás no puedo opinar porque no las conocí, pero si son como él las describió espero que nunca se crucen con mi sable.
Alex se moría de la risa y parecía estar disfrutando mucho la situación...
-¿Cómo conoció a Ariella y al señor Triss?
-Mientras estaba en una misión de mi orden, es información confidencial.
-¿Y ahora acompañara a Ariella en su gira?
-Como parte de su guardia de seguridad personal me parece lo prudente. Ahora si me lo permiten tengo trabajo que hacer.
Nadie hizo más preguntas y me dejaron pasar. Alex caminó adelante mío, y se iba riendo bastante mientras avanzaba.
-¿Qué es tan gracioso?
-Creo que nunca más te van a querer entrevistar
-Era mi idea por si no te diste cuenta- me reí- además hacen preguntas bastante tontas.
Caminamos por varios pasillos hasta que llegamos al cuarto de sonido detrás del escenario. Todrik se reía a más no poder mientras veía la entrevista que me acababan de hacer en uno de los monitores.
-Veo que te está pareciendo gracioso a vos también- le dije mientras lo abrazaba.
-Pobres periodistas, creo que ninguno pensó que les podías responder así.
-Con tus antecedentes no me sorprende.
-Me alegro que no te parezcas en nada a esos antecedentes- dijo y me besó.
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"Caballero Hope, ya terminé lo que tenía que hacer... y este aparato, ¿dónde me encuentro con ustedes?"
"¡Hola Derlin! Te paso el cronograma de recitales de Ariella. Podés estimar el tiempo de llegada y si tenés listo el talisman me podes encontrar donde te parezca mejor. Hope"
Le había mandado la respuesta encriptada, no le iba a venir mal un poco de práctica en decodificación.
Ya me había acostumbrado bastante a ser parte de la seguridad de Ariella, no era difícil, solo había una cosa que me molestaba bastante, la prensa... sabía que no había remedio con eso así que tampoco me quejé. Era un tema menor comparado a la importancia de cuidarla a ella y no solo porque era una "misión" de la Orden sino porque la quería demasiado como para permitir que le pasara algo.
Hoy me tocaba salir primero así que me subí a la moto de Todrik y llegué diez minutos antes al hotel. Siempre era bueno que alguno de nosotros estuviera esperando en el lugar de llegada, solo por si a alguien se le ocurría molestar demasiado cuando Ariella bajaba del vehículo.
Cuando llegué al lobby del hotel me encontré a un amigo que estaba esperándonos:
-¡Hola Derlin!- lo saludé y lo abracé, él me respondió el abrazo- Veo que pudiste con el talismán, sabía que ibas a poder.
Había armado el talismán él solo, sin consultarme ni una vez.
-Gracias Hope, muy bueno el recital.
-Sí, cada vez mejores los recitales de Ariella ¿vos como estás?
-Bastante bien, el viaje fue tranquilo, ¿y usted? ¿disfrutando de la vida de una popstar?
-Querrás decir vida de guardaespaldas de una popstar. Sí me gusta mi nuevo trabajo, aunque no sé si puedo llamarlo así… la prensa puede ser muy molesta a veces pero es un asunto menor... ¿pudiste terminar lo que te faltaba arreglar en Taris? Y no me trates de usted que me haces sentir vieja.
-Sí, les di una buena lección a unos policías y a unos pandilleros, y bueno, las fotos que te mande. No es por eso, es por respeto, aunque Liz siempre me dijo que sea más casual...
-Sí, las fotos están adornando mi Casa de los Recuerdos. Yo también te respeto y no por eso te trato de usted. La próxima que me trates de usted pienso enojarme bastante.
-Está bien, ¿cómo están todos?
-Todos están bien, bueno Alex quizás no, Todrik y yo le exigimos bastante con el entrenamiento... pero él no se queja nunca, es un buen alumno. Supongo que vos vas a entrenar con nosotros no?
-Por supuesto, nunca viene mal.
Le sonreí.
-Creo que hasta ahora nunca entrenamos con el sable vos y yo...
-No, creo que no, si practiqué con Alex si mal no recuerdo, siempre estuvo ocupada cuando estábamos entrenando.
-Sí... es cierto estuve en muchas cosas a la vez... perdón, soy así siempre, es normal en mí.
-Me di cuenta durante la operación en Taris, ¿cómo fue la demanda?
-La levante por el momento, pero si vuelvo a necesitar ayuda te a aviso.
-¿Ahora necesita ayuda con algo?
Otra vez tratándome de usted, este chico no iba a cambiar más.
-¿Con los fans? Te digo que a veces son peores que un sith- sonreí.
Sonó mi datapad, era un mensaje de Todrik avisándome que ya estaban llegando al hotel.
-Estan llegando, vamos.
-No creo que sean peores que las protestas en Bastion, pero está bien.
Se subió la capucha y caminó unos pasos atrás mío.
-¿Ya te asignaron como algún tipo de guardaespaldas?
-¿Hay tipos?
-Tipo jedi, tipo sheshishoshan, tipo mandalore.
-mmmmm supongo que tipo Jedi. Y es Zeison Sha- le corregí.
Justo ese día tenía puesta la túnica Jedi, había aprendido de Liz que decir la frase "asuntos jedis" evitaba responder muchas preguntas indeseables. Pero no había usado la túnica por eso, sino porque a pesar de las cosas que no me gustaban de la Orden yo era un caballero jedi, y lo iba a seguir siendo hasta el día de unirme con la Fuerza.
-Ah, eso, sonó parecido.
-Deberías estudiar un poco más sobre culturas
-Sí, en eso tiene razón...
Cuando llegó la camioneta Todrik bajó al lado de Ariella y yo me ubiqué al otro lado. Noté que Derlin estaba usando la Fuerza para calmar a la multitud que se había agolpado en la puerta. Iba a ser muy útil tenerlo como asistente de seguridad.
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Me quedé mirando los controles de la nave mientras despegaba solo por costumbre e inercia, y porque me gustaba mucho mi nave, la quería demasiado. Me gustaba quedarme en el cuarto de control a pesar de que podía manejarlo estando en cualquier parte de la nave.
Los integrantes de mi tripulación eran ahora también mi familia, le había dado una buena habitación a Derlin, me alegró bastante que quisiera venir con nosotros, era demasiado joven para quedarse enseñando en una academia. Me había vuelto a poner la túnica Jedi gracias a él, me había regalado una cuando todavía estábamos en Taris, él también opinaba que el violeta me quedaba mejor, pero esta era celeste.
"Esa túnica tiene un valor muy importante porque salió de una academia"
Quizás en algún momento yo también creara una academia como Liz, pero no iba a ser ahora.
Mi abuelo se había vuelto a ir, siempre era igual con él, esperaba que esta vez no pasaran tantos años antes de poder saber de él y abrazarlo de nuevo... Volver a pensar en la batalla me hizo pensar que ni siquiera la disfruté... supongo que eso es bueno, realmente pensé que la iba a disfrutar, que iba a disfrutar matando a esos malditos, pero solo fue una misión más después de todo, y lo que más me preocupó fue Liz en esos momentos y solo quería sacarle al sith de encima. La muy loca se había metido en el medio de la reunión con una ilusión que la mostraba cargando cientos de detonadores térmicos y los aprendices del sith la atacaron todos al mismo tiempo. Agradezco que mamá me enseñó este poder, y pudiéramos llegar a tiempo para ayudarla. Igualmente sus razones para hacerlo fueron bastante buenas, y realmente no encontré yo una forma mejor, así que no la culpé, e incluso ya no me pareció tan loco cuando lo explicaba.
El General mandó a quince de sus soldados a ayudarnos con el asunto. Por suerte, después de esperar varios días Liz había podido descubrir el lugar y hora de encuentro y pudimos reducir a todos. Varios cultos del lado oscuro se habían quedado sin sus líderes, pero seguramente iban a volver a surgir de alguno de los cultitas. Sentí las manos de Todrik tapándome los ojos de repente y le dije:
-Puedo ver aunque me tapes los ojos.
-Sí, pero no pudiste sentirme hasta que lo hice.
-No, porque sabés el truco de Liz- sonreí- quizás deba aprenderlo algún día, pero no es mi estilo...
Me paré del sillón de mando y lo besé.
-No, tu estilo es atacar de frente con el sable, ya lo viví...
-Mientras no vuelvas a estar un mes y nueve días sin dar señales de vida no va a volver a pasar. Y si lo hacés tu abogado la va a volver a pasar muy mal... solo tengo que pedirle a Derlin que me vuelva a ayudar con eso.
-Nunca entendí porque lo hiciste.
-Mantenía mi mente ocupada y distraída, mi abuelo me retó, me dijo que me concentrara en la misión... pero la verdad es que no había mucho que yo pudiera hacer, la infiltración no es lo mío.
-Hacía bastante que no te veía usando la túnica jedi...
-Me la regaló Derlin, ¿no te gusta cómo me queda?- sonreí.
-Creo que no hay algo que no me guste como te queda... aunque si tengo que elegir te prefiero sin ropa.
Me reí y lo volví a besar.
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¡Hola Liz! ¿Cómo estás? Hace bastante que no te mandaba un mensaje, estoy trabajando mucho últimamente, creo que Derlin y Alex tienen razón, debería descansar un poco de vez en cuando... ¿cómo va todo en la academia? Acá está todo igual que siempre, creo que después de año y medio de perseguir siths estas son unas vacaciones en comparación... creo que por primera vez desde que nos conocemos puedo decir que estoy relajada. ¿Cuándo nos vamos a encontrar? Ya varios fans de Ariella me preguntaron cuando Liz y ella iban a cantar en vivo, deberías pensarlo los fans ya te reclaman. Con respecto a la misión ya neutralizamos con éxito cuatro cultos al lado oscuro en los planetas que visitamos. Siempre hago que Derlin coordine las operaciones, resultó ser bastante bueno en eso. Obviamente también llevo a Alex, creo que la mejor forma de que aprenda cómo es un combate de verdad es que este en uno. Lo mismo con Derlin. No por eso soy menos exigente en los entrenamientos, ni Todrik tampoco. Tengo además que contarte algo importante... pero no sé bien cómo decirlo, creo que por eso no te llamé... estoy un poco asustada... creo que nunca había sentido la ausencia de mamá como ahora... estoy embarazada. No sé cuando fue que confundí los tiempos, creo que pasó cuando Todrik estuvo esos días sin decirme que estaba vivo... no le dije a nadie todavía, realmente no sé cómo pueda reaccionar Todrik con una noticia así... nunca hablamos del tema. Tampoco sé si estoy preparada para ser madre, realmente pensaba esperar bastante tiempo más antes de siquiera planteármelo y planteárselo a él... me siento muy rara, no solo por mi estado sino por estar ocultándole algo así... tengo que decírselo en algún momento lo sé, pero no sé cómo ni cuándo... perdón por contarte esto a vos pero sos la única persona en la que confío para contarle algo así y además sé que me vas a decir lo que pensás sin rodeos. Te quiero mucho Liz. Ojalá estuvieras acá, me hubiera gustado contarte esto personalmente.
¡Hola Hope! ¡Felicitaciones! Me pone muy contenta por vos. En breve tendrás noticias mías, ahora estoy con asuntos políticos y con el armado de la academia de Lucazec y sin tanta disponibilidad como quisiera. Además ¿qué querés que te diga? ¿Consejos de cómo ser madre? ¿Querés traerla y educarla en Lucazec?
PD: Decime que es joda que la nena es de Todrik.
Me reí mucho cuando leí su respuesta, ¿ya estaba asumiendo que iba a ser una nena? Pero Liz tiene razón, ella no va a poder aconsejarme en algo como eso...
Además mamá tampoco sabía cómo ser madre cuando me tuvo a mí… Y la realidad era que tampoco tenía mucho tiempo para seguir pensando, en pocas semanas ya se iba a empezar a notar.
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Mi nave era lo suficientemente grande como para que podamos entrenar sin problemas. Derlin se había acoplado a nuestra rutina de entrenamiento, por fin pude cruzar sables con él y la verdad que es muy bueno. No me sorprendió si venía entrenando con Liz, creo que ella era mucho más exigente que yo. Alex mejoraba día a día y sus progresos eran a pasos agigantados, ya podía incluso sorprenderme en algunos ataques y en defensa respondía muy bien. No iba a tener problemas para buscar cristales en las cuevas. Igualmente iba a mandarlo con Derlin. A pesar de lo que había pasado con la hija de la ladrona Alex no dejó de confiar en él y empezaron a entrenar bastante tiempo juntos.
Eso me dejaba a mí tiempo libre para entrenar lo que le había prometido al maestro Ynndred, cuando estábamos en el Hiperespacio yo me concentraba y sentía cómo la Fuerza fluía a través de la nave, de las personas que estaban en ella y con el espacio que la circundaba. Al estar tan habituada a la nave no me costaba mucho trabajo conectar con ella. De a poco fui entendiendo cada vez más como se sentían en la Fuerza los viajes en el hiperespacio, pero iba a necesitar la ayuda del maestro para poder seguir avanzando. Me pregunté si lo iba a encontrar en los bosques de Dantooine. De todas formas tenía que volver o el Dr. Phineas no me lo iba a perdonar.
Había dado por finalizado el ejercicio cuando me di cuenta que era bastante tarde y necesitaba descansar, por una vez tenía que tomar consciencia de que ahora no solo podía preocuparme por mí, sino que también tenía que pensar en alguien más. Por primera vez puse las manos en mi vientre y pensé:
“Hola bebé, soy Hope y voy a ser tu mamá”
Cuando entré a la habitación Todrik dejó el datapad sobre la pequeña mesa de luz.
-¿Seguís practicando esas cosas voladas del hiperespacio?- me preguntó.
-Sí, son interesantes “esas cosas voladas” aunque no lo creas.
-No para mí, gracias. Hoy viniste más temprano de lo usual ¿qué pasó?
-Nada, quería descansar un poco ¿Con quién hablabas?
-Con el representante de Ariella. Cuando lleguemos mañana quiero que tenga todo listo. De vez en cuando tenemos que encontrarnos para que Ariella firme algunos documentos. Pero eso es muy burocrático para estar hablándolo ahora.
Me acosté al lado de él y lo abracé. Él me abrazó y empezó a acariciarme el pelo.
-¿Cuándo me vas a decir lo que te pasa? Sé que hay algo que no me estás diciendo. Y sé que como te lo estoy preguntado ahora no te va a quedar más opción que mentirme o responder, y además sé que no optarías por la primera opción. Sabés que no me gusta obligar a nadie a hacer nada, y no te voy a obligar a que me digas si no querés, pero deberías saber que podés confiar en mí si te está pasando algo, sea lo que sea…
-Vamos a tener que volver a Dantooine…
No me dijo nada y el silencio incómodo me puso algo nerviosa.
-Creo que voy a tener que usar el mismo truco que usé la otra vez con el reproductor de música.
Eso me hizo acordar a la primera vez que nos habíamos besado. Eran otras las circunstancias pero no dejaba de ser cierto que el truco había funcionado.
-Vamos a tener que volver a Dantooine porque quiero que nuestro hijo nazca ahí, y porque además si doy a luz en otro planeta mi médico se va a enojar bastante.
Todrik se quedó paralizado unos segundos que parecieron eternos. Después me abrazó y con una sonrisa irónica dijo:
-Quién lo hubiera dicho.
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Llegamos a Dantooine en primavera, no había mejor estación que esa para vivir en mi planeta natal. El clima era templado, había mucho sol y el aire del campo siempre fue algo que adoré.
Extrañaba un poco los entrenamientos con el sable, obviamente Todrik no me dejaba hacer algunas cosas, entre ellas entrenar violentamente, y cuando veía que me estaba excediendo con el trabajo siempre me pedía que descanse un poco.
No es que yo no quisiera descansar es que estaba tan acostumbrada que a veces no me daba cuenta de cuando parar.
Le había avisado a Liz que ya estábamos en Dantooine, no pidiéndole que viniera porque sabía que estaba muy ocupada, pero esperaba que pudiera estar cuando naciera el bebé.
El Dr. Phineas dijo que todavía faltaba un mes, así que decidí relajarme mientras no pudiera entrenar. Lo primero que hice fue revisar la biblioteca de papá, tenía varios libros que hablaban sobre teorías de lo que pasaba en el hiperespacio cuando se viajaba a la velocidad de la luz así que empecé a leer sobre eso. Cuando había algo que no entendía la maestra Vyslin me ayudaba.
Me gustaba sentarme a leer en el pasto mientras veía a Derlin y a Alex entrenar.
-Te traje algo para tomar.
-Gracias Ariella- dije agarrando el vaso con jugo de frutas que me ofreció- Parece que te sintió venir...
Había sentido el golpecito justo antes de que Ariella me hablara. Ella se sentó al lado mío y yo le dije:
-Dame tu mano.
-Se está moviendo- sonrió al tocarme la panza donde yo le indiqué- ¿Te duele?- me preguntó.
-No, a veces cuando se pone inquieto es un poco molesto, pero no duele.
-Todrik todavía no eligió el nombre.
Habíamos arreglado que Todrik elegía el nombre si era varón y yo elegía para la nena.
-Yo ya elegí.
Ella me miró expectante.
-Si es una nena se va a llamar Faith- sonreí.
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CONTINUARÁ?...
miércoles, 9 de noviembre de 2011
Hope: Una estrella que brilla por la justicia
Soy una desagradecida, no lo visité la última vez que estuve en Dantooine y él fue una gran ayuda en los momentos que más la necesitaba... Había sido el médico de mi familia desde muy joven, y yo lo había conocido desde siempre, y aún así siempre olvido visitarlo... La próxima vez que vaya a Dantooine lo visitaré primero que a nadie. Busqué sus datos en la base de la Orden, al menos le enviaría un mensaje.
"Querido Doctor Phineas, disculpe por no haberlo visitado la última vez que estuve en Dantooine, pasaron muchas cosas desde ese momento... usted tenía razón en una en particular ¿Se acuerda la vez que estuvo en mi casa y me dijo que había visto otro hombre en mi vida? Bueno, no se equivocaba.
Al principio me costó bastante abrirme a otras personas, pero ahora tengo un grupo al que puedo considerar mis amigos sin dudarlo, yo estoy ahí para ellos y ellos están ahí para mí. Ellos son mi familia ahora. A veces tengo mucho miedo de perderlos, de volverme a quedar sola otra vez, y creo que eso puede pasar tanto por mis errores como por una batalla... Alex ahora es mi padawan, está entrenando muy duro y admito que soy muy exigente, pero así es como me entrenaba mi padre y así voy a entrenarlo yo a él. Él nunca se queja y pone lo mejor de sí, creo que no soy tan mala maestra como pensaba... Incluso estoy entrenando también a Todrik, es el nombre del chico que le conté, bueno, no es tan chico es bastante más grande que yo, me lleva unos diez años, pero seguramente usted pensará como yo que la edad no afecta en nada, además si había algo en lo que mamá tenía razón es que yo siempre fui más madura que otras chicas de mi edad. En mi viaje encontré a mi abuelo ¿se acuerda de él? No venía mucho a casa y tampoco visitaba seguido el enclave, me alegré muchísimo al saber que estaba con vida. Ahora lo voy a ayudar en una misión importante, prometo que después de eso volveré a Dantooine y le contaré más cosas.
También le alegrará saber que volví a interesarme en los estudios y en el entrenamiento, estoy aprendiendo muchas cosas nuevas. Bueno, supongo que estará ocupado, y no quiero robarle más de su valioso tiempo. Nos veremos pronto.
Hope Louise."
La respuesta a mi mensaje no tardó más de una hora en llegar.
"Querida Hope, es un gusto saber que estás bien. Sabía que habías venido pero estuve muy ocupado esos días y no pude pasar a visitarte por tu casa. Me hubiera gustado conocer a tu nuevo novio, y si no me equivoco esperas que te cuente las pistas que ese día no te conté... yo también tengo visiones pero rara vez me creen que sean verdad... No sabía su nombre pero sí estoy seguro que es un Zeison Sha, así como estoy seguro que no lo mencionaste en tu misiva para confirmar que era cierto que yo lo había visto ¿o me equivoco?
Seguramente para estos momentos ya habrás construido tu disco, esas deben ser una de las cosas nuevas que estas estudiando. Estoy seguro que hay algunas cosas que no me estás diciendo, en especial cuando hablás de tus errores. No tengas miedo de equivocarte, nadie es perfecto, y menos los jedis, mientras podamos reconocer nuestros errores y enmendarlos en la medida de que nos sea posible, eso es lo que nos hace mejores personas, no tener un sable de luz o poderes para controlar y manipular la Fuerza. Bueno, y termino esta misiva con una confesión, admito que vi al Zaison Sha y los vi entrenando juntos con un disco y por eso sabía que pertenecía a ese grupo, pero lo que me hizo estar convencido de que era él fue verte sonreír como lo hacías antes. Espero que la próxima vez que vengas a Dantooine pases a visitar a este viejo, y sino lo haces tendré que hacerlo yo. Hasta pronto.
Dr. Phineas"
Su mensaje me hizo sonreír. El doctor era igual que siempre, y no iba a cambiar, y eso me alegraba.
Hacía ya tres días que no veía a Todrik, si se había ido no iba a ser más que mi culpa. Aunque por un lado prefería que no nos acompañara a buscar al último sith por el otro no quería que me dejara. Creo que por eso estaba esquivando hablar con él, no quería que se fuera, pero también sabía que si se iba no iba a poder detenerlo, y eso me dolía. Aún así tenía que pedirle perdón por lo que le había hecho pasar y sobre todo, necesitaba saber por qué no me había impedido hacer lo que hice.
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Maestro Bao Dur,
Antes que nada, me disculpo por no haber informado algunas de las cosas que leerá en este documento, me reservo las razones de por qué no lo hice, son muy personales y para estos momentos ya no importan.Como usted ya sabe y le informé los siths volvieron y están de nuevo en la galaxia. Vinieron cuatro, de los cuales tres ya fueron derrotados y pienso seguir en la búsqueda del cuarto, pero eso no es todo. Los siths van a volver, estoy tan segura como segura estoy de que tienen otro planeta capital en las Regiones Desconocidas. La ubicación del planeta es accesible a través del talismán que les entregué del primer sith, el que fue eliminado por Todrik Triss de los Zeison Sha. Obviamente a esta información no se puede acceder salvo que se cruce la línea al Lado Oscuro de la Fuerza. El talismán es una especie de buscador o faro a nivel galáctico con el cual descubrí la ubicación del planeta, pero al ser tan impreciso poder calcularlo se necesita sí o sí ese aparato para poder llegar a él y debido a la distancia estimo que para llegar se necesitarían aproximadamente dos años viajando a la velocidad de la Luz. Confieso que en un primer momento me hubiera gustado ir allí, pero hubiera sido inútil. Obviamente no quiero decir que la Orden tenga que hacerlo, creo que es un suicidio ir allá ahora pero es la prueba fehaciente de que se están reagrupando y van a volver. Estos cuatro solo eran la punta de lanza de algún plan a futuro, un plan que incluye fomentar el Lado Oscuro en la galaxia y formar cuantos cultos al Lado Oscuro se pueda para que les sea más fácil después regresar.
Mis planes a futuro incluyen acabar con estos cultos al Lado Oscuro, y ya sé que no soy quien para opinar porque no formo parte del Consejo, pero lo mejor sería que envíen a los jedis que puedan de la Orden a hacer lo mismo, no sirve de nada que envíen a los jedis a misiones burócratas, de eso se pueden encargar otras personas más capacitadas y que puedan hacer mejores acuerdos. Los jedis tienen que ayudar a la gente en la galaxia y ahora las personas que no pueden defenderse por sí mismas están en peligro, los cultos al Lado Oscuro proliferaron estos años y estoy segura que lo van a seguir haciendo porque estos siths ya plantaron la semilla, esa era su misión y ya la cumplieron.
Como verá no le estoy pidiendo permiso, pienso hacer esto con o sin autorización de la Orden, si es necesario que renuncie lo haré, no por eso voy a dejar de seguir sus ideales, aquellos por los que lucho y por los que toda mi familia siempre luchó. Si los siths van a volver, aunque no sé cuándo será eso, yo voy a hacerles más difícil el regreso. Y cuando vengan voy a estar preparada para recibirlos.
Obviamente seguiré informando lo que averigue, en especial sobre el infiltrado que parecemos tener dentro de la Orden. Si desean contactarme personalmente será fácil que me encuentren, solo sigan la gira de Ariella Dann.
Que la Fuerza lo acompañe,
Hope Louise.
Caballero Hope
Supongo que el encriptado del mensaje se debe a nuestros recientes fallos de seguridad. De todos modos, deberia confiar un poco mas en su Orden. No es necesario que renuncie para hacer lo que dice que quiere hacer, de hecho nos parece bien que proteja a esa niña de cerca sobre todo teniendo en cuenta los planes de nuestros enemigos en este momento y los hechos recientes, que hacen que un peligro sobre ella pueda caer literlmente en cualquier momento.
En cuanto al sinnumero de cultos que parece haber distribuidos en la galaxia, las medidas para rastrearlos se han empezado a tomar desde que ustedes nos presentaron su primer informe, pero debe tener en cuenta que estamos considerando dos problemas al mismo tiempo con esto, Uno, que una "caza de brujas" a gran escala puede alertar a los cultos que podrian tomar mas medidas de seguridad. A este respecto estamos extremando nuestra seguridad para atrapar al espia que tenemos, que probablemente empezo a operar despues de estos incidentes. La segunda razon es que somos muy pocos para la galaxia aun, y que tenemos que distribuir nuestros esfuerzos bien. Por ahora , hemos estado siguiendo las ideas del Maestro Soslan en ese sentido y, si bien no hemos roto con el servicio a la republica, estamos rechazando misiones que un diplomatico normal podria hacer perfectamente. Aunque no sea declarado, de cualquier forma, la neutralizacion de estos cultos tiene en este momento la maxima prioridad
QUe la Fuerza la acompañe en su proxima mision y en las que vengan
Maestro Bao Dur del Consejo Jedi
domingo, 11 de septiembre de 2011
Hope: Futuro
-Tía Hope, buenos días, preparé el desayuno.
-Hola Alex, gracias.
-¿En qué estabas pensando?
-En lo solitaria que se ve la casa...
La casa estaba en la misma situación que yo, se había quedado sola.
-No está solitaria estamos nosotros.
-En fin, seguramente no me voy a quedar mucho tiempo...
-¿Tenés que ir al enclave?- me preguntó.
-Sí, tengo que ir a dar el reporte de la última misión.
-Tía... cuando te vayas a la próxima misión ¿puedo ir con vos?
Lo miré seria, no creía que fuera peligroso pero aún así... no era su tutora, no sabía si los tíos iban a querer dejarlo conmigo, y en caso de ser así ¿estaba yo capacitada para cuidarlo?
-¿Querés venir conmigo?
-Sí, quiero ver otros lugares, quiero aprender muchas cosas.
-Supongo que tendría que preguntarle a los tíos...
-Ellos ya me dieron permiso, les pregunté, pero me dijeron que podía ir solo si vos estabas de acuerdo.
Era obvio que ese chico me admiraba más de lo que yo podía creer y que los tíos creían que yo era más responsable de lo que en realidad era... No sé por qué Alex me seguía de esa forma, yo ni siquiera era tan poderosa como otros caballeros jedi...
Pero la realidad es que estaba tan sola que no pude negarme, él siempre me había ayudado a sentirme mejor en los peores momentos.
-Está bien, podés venir, pero prometeme que no te vas a meter en problemas. Y que vas a obedecer todo lo que yo diga.
-¡Gracias tía!- dijo y me abrazó- Lo prometo.
-Bueno, vamos a desayunar, o se va a enfriar lo que preparaste.
Empezamos a caminar hacia la casa, pocas veces me había puesto a pensar en lo grande que era, tanto la casa y los aledaños en los que había más casas pequeñas, todas de la misma estancia que había heredado de papá. Ahora que no había nadie parecía incluso más grande.
-Te queda muy bien esa túnica violeta.
-¿Te parece?
A papá también le gustaba como me quedaba ese color...
Él me sonrió. A mí ahora me costaba bastante hacerlo pero él me seguía provocando la misma ternura que cuando lo conocí, así que con él era más fácil sonreír.
-¡Claro! Es el color perfecto para vos.
-Ya te dejé venir conmigo, no tenés que seguir adulándome- le sonreí.
-¡No lo hago por eso! Mirá Hope, creo que viene alguien...
Una nave aterrizó en el patio, parecía una nave de la Orden.
-Es el doctor... ¿vos lo llamaste?
-No... esta vez no fui yo.
Esperamos hasta que descendió la nave. No hacía mucho que lo había visto. No recuerdo si estaba en el funeral de Clint pero recuerdo claramente el día que estuvo en casa, gracias a Alex y a él había logrado salir del pozo depresivo en el que estaba.
-Buenos días Hope, buenos días Alex.
-Buenos días, que extraño verlo por aquí...
-En la orden me dijeron que habías llegado, así que decidí venir a visitarte para ver como estabas.
-Gracias, estoy bien, justamente ahora íbamos a desayunar, ¿quiere unirse a nosotros?
-Claro, muchas gracias.
Alex corrió hacia la cocina y yo caminé por el patio con el médico, entramos por la puerta de adelante que daba al living, ya se escuchaba el ruido de los platos y cubiertos en la cocina.
-Disculpe por el desorden, fueron apilando las cosas y no tuve tiempo de ordenar demasiado.
-Lo sé, yo mismo apilé algunas de esas cajas...- Se quedó pensando como recordando algo, por su expresión parecía ser algo triste, nada extraño, seguramente había visto morir a varias personas esos últimos años.
-A veces lo que sucede nos excede...- dije como al pasar.
-¿Dónde estuviste este tiempo?
-No estuve en un lugar fijo, la Orden me dio algunas tareas. Están recuperando las bases de Czerca y me encargué de las más cercanas, aunque creo que próximamente me enviarán más lejos.
-Entiendo... ¿y cómo has estado?
-Bien, trabajando bastante.
-¡Demasiado!- gritó Alex desde la cocina, y el médico se rió.
-¿Ahora va a decirme que trabajo mucho?
-Claro que no, mientras no perjudique tu salud es bueno que trabajes.
-Supongo que usted tiene menos trabajo ahora, y me alegra bastante.
-Las cosas ya están tranquilas sí, supongo que no quedaría bien que diga que me alegra no tener trabajo...
-En su caso eso es muy positivo.
-Espero próximamente empezar a tener trabajos más gratos, aunque no lo creas está subiendo nuevamente la tasa de natalidad.
-Supongo que es lo normal ¿no?
-Es lo que suele pasar en tiempos de paz, sí- sonrió-
Cuando decidas tener hijos ¿vendrás a Dantooine no? Todavía recuerdo el día que naciste...
-No creo que tenga hijos doctor, antes de eso necesitaría una pareja estable, pero supongo que si decido tenerlos algún día vendré aquí.
No quería volver a decirle lo mismo que la última vez... realmente no creía que eso pasara nunca, pero tampoco quería quitarle la ilusión de creerlo.
-Bueno, al menos me dijiste algo más esperanzador que la última vez... aunque no lo pienses realmente.
Una sonrisa irónica se dibujó en sus labios.
-Supongo que no puedo mentirle... no, realmente no lo creo.
-Deberías, eres muy joven aún, no deberías cerrar tu vida de esa forma. Además eres tan hermosa como tu madre, no faltarán hombres que quieran cortejarte.
-"Cortejarte" esa es una palabra que delata su edad doctor... creo que ni en la época de mis padres se usaba- le sonreí.
-Bueno, al menos esa sonrisa sí fue sincera. Como ya sabes hay cosas que puedo ver, y si te ayuda de alguna forma, he visto un hombre en tu futuro.
-Si eso llega a ser verdad espero que al menos sea lindo.
-La Fuerza no nos muestra esas cosas...
-Que conveniente...
-Pero si quieres pistas puedo dártelas.
-¿Pistas? ¿Acaso es un misterio que tengo que resolver? Creo que usted tampoco vio nada y solo me dice estas cosas porque tiene la esperanza de que pase, y se lo agradezco pero realmente no quiero pensar en eso ahora.
-No es así, no necesito hacer eso, sé que es verdad, además sabes que no miento.
-Tampoco es que lo conozca demasiado... Además estoy muy ocupada, no tengo tiempo para esas cosas...
-Hope, ¿puedo darte un consejo? creo que la edad me lo permite... No te impidas conocer a otras personas, sé que sufriste mucho y que creés que estás sola y lo vas a seguir estando, pero no es así. Eso solo va a pasar si te encerrás en vos misma. Date la oportunidad de conocer amigos, de vivir una vida normal, lo más normal que puede ser siendo que sos un caballero jedi. En tu futuro va a haber gente que te va a necesitar, gente que va a necesitar tu guía y alguien que te va a amar, no pierdas la oportunidad de conocer y vivir ese futuro solo porque no podés salir del pasado.
-Gracias doctor, aprecio su consejo, pero lo único que le puedo prometer es que lo voy a intentar. Estos meses aprendí a seguir adelante, más allá del dolor y de todas las pérdidas en mi vida, estoy tratando de seguir aunque me está costando demasiado.
-No sos la única Hope, hay mucha gente que está en tu misma situación y también están siguiendo adelante con su vida.
Me quedé callada unos instantes sin responder, eso era cierto, yo no era la única, pero eso no quitaba el dolor que sentía...
-Supongo que voy a tener que hacerlo...
-No es así como tenés que pensar, no lo tenés que hacer por obligación sino porque querés hacerlo.
-Es fácil decirlo...
Alex trajo una bandeja con el desayuno y se sentó con nosotros.
-Bueno, entonces ¿cuáles son las pistas?- preguntó Alex.
El médico se rió y después me miró a mí. Yo no le dije nada, y me concentré en la comida.
-Es mejor que Hope lo averigüe. Además las pistas que puedo darle son muy obvias y no quiero que se de cuenta cuando lo vea.
-Hope, creo que sí es un charlatán.
-¿Viste? Yo te lo dije.
Ambos nos reímos y el doctor también se nos unió.
Hope: Liz
-Hola Liz ¿vamos a tomar algo?- seguramente tenía cara de que recién me había levantado, todavía sentía raros los ojos.
-¡Hope! Dale, vamos... Hace unos días que no te veo... ¿estuviste divirtiéndote un rato con Toddy?
-No, estaba descansando, Todrik debe estar con Ariella.
Liz se sentó en la barra y el barman le dijo:
-¿Lo de siempre?
-Sí. Bueno Hope, decime.
-Te debo una disculpa por lo del otro día. No sabía lo de tu maestro, no debí hablar así...
-Está bien, no tenías porque saberlo. Pero sí, perdimos mucha gente en el Lado Oscuro para hablar tan a la ligera de él. La tentación siempre está.
-Quería que supieras por qué lo hice, si querés escuchar...
El barman me miró para saber si iba a pedir algo.
-Para mí un café doble.
-Ya pedí bebida, así que no me voy a ir ahora.
Empecé a hablar cuando el barman se fue a preparar el café.
-Quizás debería empezar por el principio... para que entiendas lo que hice, aunque no tengo justificación... Creo que nunca te lo dije, mi familia era una familia jedi de muchas generaciones, mi abuelo fue el maestro de mi padre y mi padre me entrenó a mí. Mi padre y mi madre fueron mis maestros.
-Parece algo evidente, más considerando tu sobrino... continúa.
-Ellos eran importantes en la orden, mi padre murió combatiendo en la guerra contra los siths, y mi madre después al tomar su lugar, no me quedan más familiares que Alex y sus padres, los siths mataron a toda mi familia. Hace un año y medio atras un sith mató al hombre que amaba, lo conocí cuando me nombraron caballero jedi, tenía 15 años. Diez años lo tuve conmigo hasta que un sith me hizo decidir entre su vida o ayudarlo a liberar una criatura del lado oscuro.
Liz me miró sorprendida.
-¿Y qué pasó?
-Maté al sith antes de que liberara a la criatura, pero él antes mató a Clint, después de eso me quede sola, Alex estuvo conmigo un tiempo hasta que volvió con sus padres, y yo me enfoqué en mis trabajos para la orden, esa es la Hope que vos conociste, cuando empezamos a trabajar juntas. Mi único objetivo a partir de ese momento fue encontrar a los siths para destruirlos.
-Eso explica porque tenes esa obsesión poco sana. Pero todo lo que me decís... es pasado. Y te lo digo porque sé de que te hablo.
-Sí, es pasado, pero ver a ese niño desnudo al lado de ese altar dedicado al lado oscuro me decidió a buscar al último sith, al menos de los que están acá.
-Nadie dijo que no ibamos a hacer eso. Sólo que hay formas que no involucran pasarse al lado oscuro.
Saqué el talisman que tenía colgado al cuello.
-Supongo que no las pensé y busqué el camino más fácil. Mi padre estaría muy decepcionado de mí si estuviera acá. Con esto lo podía buscar pero solo podía verlo estando del otro lado, pensé que iba a poder volver y que si no podía Todrik me iba a sacar.
-Volviste, ya es suficiente. El tema es que quizás no haya otra vez.
-No voy a volver a hacerlo, borré la información.
Guardé el talismán abajo de la ropa.
-Me parece perfecto. Nada bueno viene de esa gente. Yo los odio tanto como vos.
-No tengo intenciones de volver a intentarlo, me di cuenta cuando hablamos que conmigo arrastro gente que no tiene nada que ver y la pongo en peligro, eso me hizo ver las cosas de otra forma.
-Ya está, ya pasó. No te hagas más problemas, tampoco te llenes la cabeza. Tuviste suerte y mucha de tener gente ahí que te pudo sacar, y tuviste la fuerza o la pureza espiritual para salir rápido. Otros no la tuvieron. Aparte, ahora tenes que estar seria y comprometida, no pensando en todo lo que podía haber pasado y no pasó. Si yo hubiera sido mejor guerrera o jedi quizás Tessa estaba conmigo o Clint con vos. No pasó. La Fuerza nos pone esos contratiempos para que podamos superarlos.
-Lo sé, pero es muy difícil. A veces creo que nunca lo voy a poder superar... hay un planeta sith allá afuera, van a volver Liz, y no sé cómo pero tengo que hacerles mas difícil el trabajo de alguna manera. Ahora sé que estar del lado oscuro no me sirve y me hace débil e irracional...
-Viviendo y haciendo tus cosas, enseñando a Alex, ayudando a la Orden. Así. No sos una martir que puede ir al planeta ese y destruirlo. Creo.
-En un momento lo pensé, pero no, no puedo, si pudiera ya lo hubiera hecho, pero no tiene sentido que vaya a morirme ahí sin razón, no voy a hacerle a Todrik lo que Clint me hizo a mí.
-Hope... tenés muchas cosas que te hacen sentir bien, que muestran que tipo de persona sos. Aprovechalas. Dale una oportunidad a tu vida. El pasado... es pasado. Vislumbrá el futuro. En serio te lo digo.
-Es lo que quiero aprender a hacer.
-Ya lo haces, tarada. Solo que preferís hacerte la sith hunter y te olvidás de todas las cosas positivas que tenés.
-¿Todrik cuenta como positivo?
Me reí.
-ajajjajaj algo así, Hope.
-Derlin me dijo que va a ir con vos.
-Sí, no era mi idea inicial, pero es lo que quiere y la verdad que su ayuda me vendría genial. La verdad que me gustaría que Der se vuelva mejor caballero de lo que es, pero él quiere ir a Lucazec y cuidarme y yo no lo veo mal, aparte ¿ser la única jedi de la academia? Mejor que él venga conmigo.
-Me parece bien si es lo que él quiere. Si en algún momento me necesitás avisame y ahí estaré. Mientras tanto voy a limpiar un poco de cultos del lado oscuro los planetas que visite.
-Es una buena idea, pero asegurate de que alguien cuide a Todrik, siempre tiende a cruzarse con el sith primero ajajjajajaj
Me volví a reir. Liz era genial.
-Sí, lo noté. De hecho la primera vez que lo contacté fue porque sabía que si había alguien que se iba a encontrar un sith era él... supongo que mi obsesión sirvió para algo bueno.
-Al menos tenes un novio- sonrió.
-Hace poco pensaba que eso no iba a pasar nunca, realmente creí que nunca me iba a volver a enamorar... así que no pienses que es imposible.
-Hey! No pienso que es imposible... solo que no encuentro candidatos. Mejor dicho, candidatas... así que si cortas con Todrik... llamame
-No te preocupes seguro no te van a faltar, te digo lo mismo que le dije a Alsh, no cuentes conmigo para eso. Para cualquier otra cosa voy a estar.
-jajajajaja esa rubia no deja nada sin tirarse. Gracias Hope, cuento con eso. Y es mutuo.
-Incluso si necesitás recursos también, veré de donde los saco o le pediré a Todrik que me pague por mis servicios
-No te preocupes, tengo mis inversiones en marcha
-Que bueno saber que ya estas preparada, yo pienso no ver más balances por mucho tiempo
-Para eso está Ellen... o Derlin
-¿Derlin viendo balances? Yo lo pondría a enseñar. Ya que se quiere quedar con vos que te ayude como jedi que es.
-Exacto... creo que él cree que ir a Lucazec es ir a ver chicas... pobre de él
-Bueno supongo que le darás vacaciones también
-Sí, pero va a un lugar dónde las mujeres mandamos. Así que si lo que busca es el amor... le va a ser algo difícil
-Eso dependerá de él. Quizas eso es lo que quiere y es joven todavía
-Así es
-Que bueno que hablamos, me hizo bien, gracias, estaba un poco triste
-ajajajaj ya pasó, Hope
-Me pregunto hasta donde me iba a dejar llegar Todrik, le llegué a decir que desaloje mi nave... hasta trajo la suya
-Mirá... tengo que pensar que tu novio tenía una estrategia... porque sino era para matarlo
-Tiene salidas así a veces, creo que ya me acostumbré, creo...
Me reí.
-Asunto tuyo, nada que yo tenga que solucionar
-No hay nada que solucionar, él me dijo que me iba a sacar de ahí y estoy segura que tarde o temprano iba a hacerlo
-Sí, como siempre igual el trabajo lo termina otro ajajajaja
-Él es así, es bastante diferente a nosotros los jedi
-Ahhhh ya tanto no sé
-Esa faceta que pone frente a los jedis no es él, no le cae muy bien la Orden en general, supongo que es irónico para él haber terminado con un caballero jedi
-No tanto, Soslan es demasiado bueno para preocuparse por que tipo de personas entrena, mientras sean de buen corazón
-Y no se equivocó.
Quizás no estuviera segura de muchas cosas, pero de una sí que lo estaba, iba a extrañar a Liz.
sábado, 3 de septiembre de 2011
Hope: Nada es tan fácil...
Tenía que hablarle a papá sobre algo importante, pero realmente no sabía como iba a reaccionar así que empecé preguntándole otra cosa, algo que también me interesaba.
-Papá... ¿existe un arma que sea como el sable de luz pero en forma de disco?
-Sí, existe, hay una orden llamada Zeison Sha que usan discos para combatir. Es raro que preguntes eso, nunca los mencioné.
-Creo que lo leí por ahí... ¿y cómo es esa orden?
-Lo único que tenés que saber es que no respetan a la Fuerza... la usan para cualquier cosa... Ni siquiera se puede decir que sean una "orden".
-¿Y usan un disco para pelear? que raro...
-Sí, usan un disco así como nosotros usamos el sable de luz.
-Supongo que no es tan preciso como un sable... pero debe ser útil como arma a distancia...
-Lo es, algunos se están uniendo a nosotros, otros no quieren hacerlo. Es una lástima porque los que no se unan serán un blanco fácil para los siths...
-¿Cuando se va a terminar todo esto papá? No quiero que te vayas...
-Clint...
-Otra vez te quedaste dormida sobre el panel de control.
Lo abracé y lo besé.
-¿Hablaste con papá?
-Sí, ya hablé con él. Creo que lo entendió... Me dijo que si te pasaba algo él se iba a encargar de que yo sufriera lo mismo.
-Perdón por hacerte pasar por esa situación...
-Nos vamos a ir a vivir juntos Hope, haría eso y más si fuera necesario.
Lo besé otra vez, era tan feliz con él...
-Voy a volver a hablar con él antes de que se vaya.
-¿Lo enviaron a una misión?
-Va a estar en el frente... estoy bastante preocupada por él... es muy poderoso pero... no sé... tengo un mal presentimiento.
Él me abrazo.
-Todo va a estar bien, tranquila, yo estoy con vos.
Clint me abrazó y me acarició el pelo, me sentía muy segura con él. Sabía que él iba a cuidarme siempre, y yo lo iba a cuidar a el.
Hope: mamá
-¡Mamá, mamá! ¡Mirá, se mueve!
El droide que era bastante más alto que yo se movió de donde estaba guardado y mamá corrió enseguida hacia mí y me levantó en brazos asustada.
-Hope ¿qué hiciste?
-Le toqué la mano mami.
Ella me miró sorprendida, solo tenía cinco años la primera vez que usé mi poder.
-Claro que se mueve si lo encendés, es un droide.
-¿Yo lo encendí? ¿Puedo jugar con él?
-Con este droide no Hope, es de mamá.
-¡Yo también quiero un droide!
-Bueno, está bien, pero tendrás que darme tiempo para programar uno ¿de acuerdo?
-¡Sí! ¡quiero jugar con droides! ¡Papá, papá! Mamá me va a regalar un droide.
Papá entró por la puerta de la cocina, tenía la túnica jedi reluciente como siempre, de color morado. Se acercó a mí y me dio un beso en la frente y después le dio un beso en los labios a mamá.
-¿En serio?
-¡Sí! Porque no puedo jugar con el droide de mamá...
-En fin, tendré que programar un droide para Hope, me pregunto por qué no serás como las demás niñas y jugás con tus muñecas...
-No me gustan las muñecas, son aburridas...
Mi papá se empezó a reír y me tomó en brazos.
-Papá ¿vamos a pasear en la nave?
-Ahora no puedo, tengo que volver al trabajo después del almuerzo, pero te prometo que mañana iremos a pasear ¿a dónde te gustaría ir?
-¡A ver las piedras brillantes!
-Esas piedras se usan para fabricar los sables de luz ¿sabías?
-¿Sí? ¿Puedo agarrar una?
-Tu problema es que siempre querés todo, y yo soy tan mal padre que siempre te doy todos los gustos...
Mamá se empezó a reír.
-¿Cuando voy a poder tener un sable de luz?
-Todavía falta para eso Hope, tenés que entrenar mucho primero.
-¡Quiero entrenar! ¡Quiero un sable de luz!
-Paciencia hija, ya lo vas a tener.
*****
Mamá era muy hermosa, siempre estaba muy bien vestida y arreglada. Incluso cuando estaba en la casa y usaba su mono para trabajar se veía increíble. Yo nunca me parecí a ella, me pregunto por qué será... jamás me gustó usar maquillaje y ella siempre lo usaba. Mamá era una diosa, no me parecía raro que papá se hubiera enamorado de ella apenas la vio.
-Hope, voy a enseñarte algo, pero espero que entiendas que tu padre no tiene que enterarse. Este poder no está muy bien visto socialmente... me refiero más que nada a la Orden.
-Tranquila mamá, no le voy a decir nada, ya estuve tomando clases también con el abuelo.
Mamá sonrió, sabía que a papá no le gustaba que el abuelo me enseñara a pelear sin armas.
-Bien, este poder ya lo usaste una vez antes, así que no debería ser tan difícil que puedas controlarlo. Vamos a mi nave, será más fácil con algo que conozcas.
-¿Qué poder es? ¿lo usé antes? ¿Cómo lo pude usar antes si nunca me lo enseñaste?
-No quisiste hacerlo, fue espontáneo. Cuando tenías cinco años activaste un droide que estaba construyendo. Todavía estaba en fase experimental y me asusté mucho.
Me reí.
-¿En serio?
-No es gracioso...- dijo ella pero me sonrió.
-Tu padre no sabe que yo puedo usar este poder, y creo que es mejor que eso siga así, por eso te pido que no le digas que te estoy enseñando.
-Está bien mamá, lo prometo.
*****
¿Me había quedado dormida? ¿qué hora era? Este planeta tiene muchas horas... Estábamos todavía en el hotel... Otra vez mi cuerpo me cobraba la estancia en el lado oscuro, me sentía bastante cansada a pesar de haber dormido ¿Dónde estaría Todrik? me vendrían muy bien unos masajes ahora...