miércoles, 13 de julio de 2011

Hope: Relaciones


Alsh

Después de entrenar con Alex me quedé en el patio relajándome y meditando, hasta que me llegó un mensaje al datapad. Era de Soslan que decía que Derlin podía estar algo inestable para una misión de la envergadura que íbamos a empezar. Tenía que confirmar mi pedido de Derlin para la misión de caza de siths y además me informaba que si necesitaba más gente, me asignaban a alguien más. Si no había entendido mal Soslan había sido el anterior maestro de Derlin… si él
lo decía tenía que tenerlo en cuenta. Además después de lo que Derlin había dicho sobre mi capacidad para entrenar a Alex... todavía latía en mi mente… Solo había alguien que podía hablar con él y decirme si estaba en condiciones de venir o no: Liz.
Le respondí a Soslan con el siguiente mensaje:
“Un asunto así prefiero hablarlo personalmente, esta misión es muy importante.”
Y acto seguido le envié un mensaje a Liz.
“Liz, me dijo Soslan que Derlin está algo inestable para ir a esta misión, no sé si te contó lo que me dijo, por eso prefiero que lo hables vos con él. Yo voy a hablar con Soslan. Necesito saber si lo
podemos llevar o no, esta misión es muy importante y no sé si Derlin podrá con ella. Sé que sos la más indicada para decirme si podemos llevarlo o no”.

Había sido un día bastante largo, primero hablar con Todrik sobre lo de Clint, después hablar con Ariella, y por último lo de Derlin y Alex… Pero había algo más importante que todo eso, lo que me dijo Todrik no era algo para tomarlo a la ligera, y el momento y la circunstancia en que lo había dicho hacía que fuera aún más importante… Si bien sabía que nuestra relación no era la misma que cuando había empezado realmente no esperaba esa confesión y la verdad es que ahora me estaba pasando algo similar, no me imaginaba mi vida estando sin él.
Cuando ya estaba por volver a la casa pasó Alsh y me dijo:
-Hope, ¿sabes dónde está Toddy?
Fueron unos segundos de sorpresa hasta que me empecé a morir de la risa. Tardé un poco en responderle, porque no podía parar:
-Seguramente está en su nave con Ariella.
-Ahh... gracias
Y se fue sin decir más. Yo me seguí riendo sola un rato más, tenía que ir a buscar a Todrik, no podía resistir la tentación de llamarlo por ese apodo tan gracioso, el solo pensarlo me hacía reír más. Lo busqué en la nave, cuando llegué estaba saliendo del estudio de grabación de Ariella, cuando lo vi no pude evitar reírme. Él me besó y me preguntó:
-¿Qué pasa?
Me había empezado a reír de la nada, así que no lo culpé por querer saber.
-Te estaba buscando Alsh ¿la encontraste Toddy?
Lo abracé y me empecé a reír con ganas. Pensé que ojalá lo hubiera escuchado también Ariella.
Pero fue muy raro, yo pensé que se iba a reír conmigo y sin embargo no se reía.
-Juro que nunca me… HICE llamar así, es parte del...eh... ¿humor? supongo… de Alsh
-¿Por qué? es un sobrenombre muy tierno- y además era muy gracioso- ¿Loch también te dice así?- dije mientras me seguía riendo- Supongo que tu maestro no te dice así... Quizás solo le decís ese apodo a las chicas lindas.
Me miró sin reírse, si él no se reía dejaba de ser gracioso, me quería reír con él, no de él, así que dejé de hacerlo.
-Digamos que solo Alsh me llama así…
No parecía querer hablar del tema. Era evidente que había tenido algo con ella, y por lo que me había dicho de sus anteriores relaciones, asumía que no había terminado muy bien…
-Supongo que se tienen mucha confianza para que te llame así.
-Digamos, si...
-¿Era tu novia?
-No, yo no le llamaría que fue eso, pero hubo algo sí, hace un tiempo.
Lo había dicho casi con bronca, qué raro… Lo miré para ver si quería seguir, no lo iba a obligar a hablar si no quería. No parecía afectado por el asunto, más bien le daba lo enojaba por algo.
-Bueno, no creo que sea tan complicado como lo mío…
-No, para nada, tampoco tan importante.
Sonrió, pero era una sonrisa más bien amarga. Conocía esa cara, era la misma que tenía cuando le dije que sí a enseñarle “trucos mentales” el primer día que había venido a casa. Ahora entendía por qué le había dicho que sí, creo que no iba a poder decirle que no a nada cuando me pusiera esa expresión. Le acaricié la cara y lo besé.
-No tenés que contarme si no querés, además no me gusta ese apodo, no va con vos, pero es gracioso, no lo podés negar.
Esta vez sonrió en serio, y me quedé más tranquila.
-Supongo que lo hizo como una triste manera de darse importancia...
-¿Vos decís que está celosa?
-No tengo mucha idea y no sé si quiero saberlo
-Bueno, supongo que tendremos que lidiar con otra adolescente. Ya tenemos varios, uno más no nos va a afectar.
-Hace un tiempo... no muy largo, tampoco muy corto, tuve algo con ella. Me interesó... bastante... éramos amigos hacía algún tiempo, pero yo la había visto como una nena y nada más... en un momento... bueno, creció.
Lo dejé hablar, le costaba bastante contarlo, pero supuse que le iba a hacer bien decirlo.
-Pero ella estaba, digamos, medio descontrolada en ese sentido, así que no me prestó atención en aquel momento, a mí no me gusto mucho el rechazo... pero bueno lo acepté. Seguimos siendo amigos, después pasó... más de un año, y a la señorita se le ocurrió que estaba enamorada de mí. Yo me lo tomé... sin tanto entusiasmo… pero sí, estuvimos juntos un tiempo, hasta que yo le dije que después de lo que había pasado no me la podía tomar en serio.
-Eso parece complicado... y más habiendo una amistad de por medio
-Al principio se desesperó, dijo cosas horribles, después lo aceptó... o eso supongo, cortamos hace...- se quedó calculando el tiempo- 10 meses.
Eso no era tanto, me pregunté por qué la había llamado si había pasado eso con ella… pero no le di importancia.
-Supongo que no le debo caer muy bien...- dije sonriendo.
Él me abrazó por la cintura y yo le tendí los brazos al cuello.
-No es algo que me vaya a quitar el sueño.
-A mí tampoco.
Me besó, fue un beso largo y apasionado, pero a la vez suave. Cada vez me gustaban más sus besos.
-No hay mucho más que decir al respecto, excepto que me dio bronca en su momento.
-Bueno, yo sí tengo algo que decir al respecto. Confieso que cuando esto empezó solamente me estaba divirtiendo, y admito que me divertía bastante... quizás no me hubiera importado que estés con otras mujeres además de mí... pero digamos que ahora no pienso lo mismo, así que ojo
con lo que hacés.
Ambos nos reímos.
Esa frase decía muchas cosas detrás, no lo dije directamente pero sabía que él iba a entenderlo. Supuse que ya lo sabía pero esa era la confirmación de que ahora para mí nuestra relación era en serio y no simplemente algo con lo que pasar el rato.
-Si yo fuera tan estúpido y suicida como para engañar a una chica que maneja el sable de luz como vos... te juro por La Fuerza que Alsh no estaría en la lista de candidatas, ni en la suplente.
Lo dijo con bastante convicción y dio a entender que ella no tendría chance de todas formas.
Me reí y le dije:
-No lo dije por ella específicamente, lo dije en general.
Él me abrazó contra su pecho y me dijo:
-Mensaje recibido, caballero Hope.
Me quedé así abrazada a él, sin intenciones de moverme.
-¿Hablaste con Ariella? ¿Está bien?
-Supongo que sí, prefiere no pensar en el asunto por ahora, pero Derlin causo alguna mella sin duda, no sé qué hará ese chico ahora.
Me sorprendió que no lo dijera mal, sonaba casi comprensivo…
-Pero no creo que a Ariella le haya sido totalmente indiferente la propuesta... supongo que cuando llegue el momento tendré que dejarla crecer- continuó.
-Eso sin duda, Ariella va a crecer sea ahora o más adelante, pero si Derlin no la puede esperar, no es el indicado, y esto ya se lo dije a ella. No conozco muy bien a Derlin, y la realidad es que no es bueno lo que creo de él ahora… Digamos que creo que está en una edad, en que básicamente cualquier mujer le da lo mismo.
Todrik se puso nervioso, me estaba acariciando el pelo y dejó de hacerlo después de lo que dije. Después de hablar con Derlin y después de lo que me había dicho Soslan en ese mensaje no podía creer otra cosa. Era muy inmaduro para la edad que tenía.
-Pero no te preocupes, yo misma voy a hablar con Ariella- finalicé.
Sentí que otra vez se relajaba.
-Quiero que esté lista por si pasa eso, y que no la tome por sorpresa.
-¿Que él se vaya con cualquier otra?
-Sí.
-¿O lo intente?- se rió- Está bien, habla vos con ella. Si es así asegurate de que entienda con que chico trata.
-Sí, es lo que quiero hacer. Que ella sea la que tenga la palabra final siempre, no él, o cualquier otro.
-Juro que pensé que era un tipo agradable. No es tan chico, y es Jedi.
-No sé qué le pasó, no era así antes, supongo que ser nombrado "caballero jedi" le subió los humos a la cabeza. Es parte del orgullo jedi, supongo.
Se empezó a reír bastante por ese comentario.
-Ahora si suenan como primates.
-O quizás fue la mala influencia de Liz- y me reí yo.
-No sé si entiendo esa parte muy bien... en fin, lo dejo en tus manos.
-Mejor que no lo entiendas, yo me encargo.

*****

A la tarde fui a hablar con el maestro Soslan, le avisé a Todrik que iba a ir al enclave y después de ahí a comprar algunas cosas que hacían falta para acondicionar la nave. Soslan me había dicho que podía ir en cualquier momento, así que cuando llegué solicité verlo y me dijeron que espere en un jardincito rodeado de flores azules. Me quedé viéndolo más que lo que me hubiera detenido otras veces mientras lo esperaba. Definitivamente Todrik era el responsable de que ahora
estuviera así de romántica.
-Buenos tardes maestro Soslan.
-Buenas tardes Caballero Hope
-No voy a robarle mucho tiempo, usted conoce mejor que yo a Derlin, y si bien tuvimos un desencuentro, él es parte de mi equipo, aún así, esta misión es muy importante como para que venga alguien que no esté en las condiciones mentales adecuadas. De darme esa información se
encargará Liz, pero por si acaso, necesito saber si disponemos de alguien más y quien sería, en caso de que Derlin no esté apto para hacerlo.
-Mmmmmmmm podría ser Valf, creo que sería un buen paso para él, y le ayudaría a exorcizar sus fantasmas. Por la naturaleza de la misión y la disponibilidad, podría recomendar al Caballero Darrah.
Darrah era la chica Togruta que había visto hablando con Derlin, definitivamente no era una buena opción…
-¿Y quien cree que este mejor preparado? Si es que usted los conoce…
-La Caballero Darrah es muy capaz y da por la edad para camuflarse con la gente que suele ser público de Ariella.
-Si así lo cree hablaré con ella, esperaré igualmente hablar con Liz primero. Y hablaré también con Valf para tomar una resolución definitiva. Realmente lo que menos quiero en mi nave son problemas de amoríos adolescentes.
Sabía que esa última frase no había sonado nada protocolar, y había tirado abajo todo lo anterior, pero realmente no me importaba, lo hice a propósito.
-Comprendo. Están practicando, no tienen misiones asignadas.
-Gracias maestro, le informaré cuando tenga la decisión definitiva.
Lo saludé como indicaba el protocolo y salí del enclave. Antes de hablar con nadie necesitaba la respuesta de Liz, si tenía que elegir prefería a Valf, creía que traería menos problemas a futuro.

miércoles, 6 de julio de 2011

Hope: Adolescentes


Decidí hacer unas galletitas para acompañar el té, creo que no había hecho galletitas desde la última vez con mamá... eso había pasado hacía mucho tiempo. Todavía estaba mezclando los ingredientes cuando se acercó Derlin.
-Maestra Hope
-Te escucho Derlin
En un principio pensé que me iba a preguntar sobre Ariella, pero no tenía nada que ver con ese asunto.
-Creo que puede llegar a tener una huesped en el futuro... o quizá dos... o ninguna- dijo sirviéndose más chocolatada, esto se ponía cada ves más misterioso- estuve hablando con Alex, está pasando por un momento bastante duro.
¿Alex pasando por un momento duro? Jamás lo había visto tan contento como después de que le dije que iba a ser mi padawan... eso era muy extraño.
-¿Huespedes?- le pregunté- Yo me estoy yendo en como mucho una semana. Y realmente dudo que vuelva rápido.
-¿Eso lo sabe alex?
-Alex va a venir conmigo, porque es mi alumno, y tiene que entrenar. Cuando le pregunté si iba a ser mi padawan dijo que sí- No sé que le pasaba a Derlin, pero sus rodeos me estaban poniendo nerviosa...- Y prefirió eso a la academia, así que fue su decisión- finalicé.
-¿Pero sabe que se van?
-Debería saberlo, y si no no veo problema, se enterará cuando nos vayamos.
-Bueno...
Parecía que de repente quería dejar de conversar, pero ya había hablado y yo no iba a dejar las cosas a medias, eso no iba conmigo.
-¿Quienes son esos huéspedes que voy a tener? ¿A quién invitaste? Debo decir que esta es mi casa y si van a invitar gente, deberían al menos avisarme.
-Yo a nadie- me dijo Derlin.
-Ah ¡¿Alex a quién invitaste?!- levanté la voz para que me escuchara desde el comedor.
-No invitó a nadie a su casa, maestra hope, quería informarle en privado, pero bueno.
¿En privado? ¿Me venía a hablar sobre algo que le pasaba a Alex y pensaba que lo iba a mantener en privado? sí, seguro.
-Si querías informar algo por privado, tendrías que haberlo dicho sin rodeos.
Alex me miró serio y me dijo:
-Yo no voy a invitar a nadie, maestro
-Entonces si ninguno de ustedes va a invitar gente a mi casa ¿Por qué voy a tener huéspedes?
La situación ya me estaba molestando, aún así traté de distraerme terminando la preparación de las galletitas.
-Porque es posible que Jenice venga, o no, y posiblemente la madre.
Alex miró muy mal a Derlin y chequeó su datapad. ¿Jenice? ¿La muchacha de Ungul? Si Derlin creía que yo me iba a meter en la vida privada de mi primo y padawan estaba muy equivocado...
¿Por qué no resolvió él el problema en vez de venir a hablarme a mí para que lo haga? Esto considerando que hubiera un problema. Está bien que sabe que soy la maestra, pero ahora por hacer eso Alex no va a querer contarle más nada. En fin...
-Ah, porque si nos vamos en una semana se va a complicar que vengan huéspedes aquí...- no lo dije molesta esta vez- No tendría problemas en otro caso.
-Bueno, puede ser que no pase de todas formas, ¿ahora si hablamos en privado?
Alex miró disconforme, parecía que estaba bastante molesto con Derlin.
-Yo no pensaba hospedar a nadie- me dijo.
-Derlin si vas a hablar sé claro
-¿Aquí?
-¿Me pueden decir ambos quién va a venir?
Bien, si venía Janice, la otra seguramente sería la madre pero realmente me estaba molestando que me estuvieran ocultando algo que si bien no tenía importancia me molestaba que me oculten.
-Y ciertamente no invité a nadie- Alex estaba super relajado, como quien sabe que tiene razon.
-Bueno, eso me alegra, porque nos vamos en una semana.
-Si, Maestro- lo dijo relajado y yo me quedé más tranquila, acá no pasaba nada y seguramente Derlin había visto un problema donde no lo había, igualmente quería hablar con Alex, por cualquier cosa. Puse las galletitas en el horno y Derlin me dijo:
-No me respondió- y terminó su chocolatada.
Bien, si había entendido mal, mejor saberlo.
-Alex cuidá las galletitas
-Sí, tía.
-Derlin- le señalé la puerta para que salgamos al patio.
-¿Qué pasa Derlin?
-Maestra, debe prestar mas atención a su padawan, esta pasando por una situación complicada y necesita de su maestra más que de un recién nombrado caballero.
Pensé que sí, realmente si él no se podía hacer cargo y tenía que decirme las cosas a mí sobre un problema que seguramente era de amoríos adolescentes entonces sí, era mejor que yo supiera todo y me hiciera cargo yo.
-¿Que le pasa a Alex?
-Llevó a una chica de 12 años a la depresión total y a amenazas de suicidio, y existe una mínima posibilidad, que espero sea mi paranoia por mi misión en Bastion, de que se escape de su casa, nave, o donde sea que habite para venir a Dantooine.
¿Eh? ¿Suicidio? ¿Me estaban jugando una broma estos dos? En fin, al menos esto me estaba sirviendo para distraerme.
-Está bien Derlin, gracias por decírmelo, voy a hablar con él ¿Algo más que quieras decirme?
-.... maestra Hope, no es que hable con él... yo me enteré de esto con que solo me abra la puerta... y es su padawan y sobrino...
-Si sabés algo más, decilo.
Sus rodeos me estaban hartando.
-Y este no es un tema reciente... Bien maestra, creo que debería prestarle mas atención a su padawan de 13 años, y si no puede asignelo a alguien mas, no solo necesita que le enseñen cosas de la Fuerza.
¿Ahora estaba cuestionando mi capacidad como maestra? ¿Que asigne a Alex con alguien más? ¿A la estúpida orden? Eso nunca. Lo miré MUY mal.
-Ahora no tengo nada más que decir
Claro ya había hablado suficiente, más de lo necesario, casi igual a lo que estaba acostumbrada de Soon, pero no de él.
Me dirigí hacia la puerta y antes de entrar le dije:
-Él tendrá 13, pero vos tenés 20 y parecés de la misma edad.
Desde adentro escuché a Alex decir que ya estaban las galletitas. Él entró y dejó el vaso en la mesada:
-Gracias por todo, pero ya me retiro.
-Que la Fuerza te acompañe- le dijo Todrik a modo de respuesta.
-Y a usted, Todrik.
Derlin subió a su repulsor y se fue sin decir más, para mi gusto ya había dicho demasiado, y cosas que era mejor que no hubiera dicho, pero bueno, le había perdonado peores a Soon.
Todrik estaba haciendo malabares con el disco y el sable, sin telekinesis, agradecí que estuvieran apagados. No había dicho una sola palabra, no sé si porque estaba yo, quizás prefería hablar con Derlin a solas.
-Alex, vení conmigo
Esta vez al que conduje al patio fue a Alex, si pasaba algo, quería saberlo. No podía creer que Derlin hubiera dicho tantas pavadas y no me hubiera dicho las cosas como realmente eran. Era mejor preguntarle a él. Vino detrás de mí muy serio.
-Sentate.
Me senté en el pasto y esperé que él hiciera lo mismo. Había agarrado unas galletitas para comer mientras tanto. Me hizo un gesto como preguntando si estaba mal, yo le respondí de la misma forma, diciendo que no me molestaba.
-Bueno, creo que entendí bien y querés ser mi padawan ¿no?
Vi salir a Todrik que agarró algunas galletitas y me dijo mentalmente.
"Voy a ver a Ariella".
-Por supuesto, tía
-Entonces supongo que confiás en mí para que te enseñe.
Él me miró sorprendido por la pregunta.
-Claro que sí, Maestra
Noté que sinceramente no entendía bien qué era lo que estaba pasando.
No lo culpé.
-Entonces podés contarme lo que le contaste a Derlin antes ¿no?
-Claro que puedo contarte, pero no me parece que fuera algo importatne, por eso no lo dije.
-Está bien, pero me gustaría saberlo, si no te molesta.
Dijo que no con la cabeza.
-¿Viste Janice? Bueno, despues de que se fue nos seguimos escribiendo, y ella en los mails me trataba mal, y entonces yo le demostré que era una boluda por tratarme mal, y que mejor no me molestara más, y ahí se puso a decir estupideces, supongo que porque se dio cuenta de que es
una boluda- dijo y se encogió de hombros.
Como pensaba, problema de amoríos adolescentes.
-Entiendo, ¿y ella va a venir acá?
-Acá, no. A Dantooine, capaz, pero no creo. Seguia diciento boludeces y Todrik me dijo algo como que la tenía que enteder y yadda yadda yadda.
Claro ese vocabulario solo podía haberlo aprendido con Todrik.
-¿Qué cosas decía?
Noté que le daba algo de vergüenza contestarme eso.
-Así que le mandé un mail de que si quería que la vuelva a querer que dejara de ser una boluda y que hiciera algo útil como por ejemplo venir a la academia a estudiar para ser Jedi- Me miró con total impunidad, como si lo que hizo fuera una genialidad- No le di la dirección de casa ni la invité aquí ni le dije que yo la iba a estar esperando.
¿De donde había sacado Derlin lo del suicidio?
-¿Y ella está bien ahora? ¿Venía sola para acá? ¿O la acompañaban?
-No sé ni si venía
-Ah bien... ¿pero vos la querés a ella o no? eso no me quedó claro...
-A mí tampoco
-Entiendo ¿Pero querés hablar con ella o no?
-Yo la quería pero ella es una boluda, y ahora no se si la quiero, y no se si la quiero volver a querer.
Otra vez esa palabra, iba a ser mejor que siguiera indagando un poco más.
-¿Por qué es una boluda? ¿qué hizo?
-Le dije eso porque Derlin me dijo que le muestre una vida mejor ¿no me queres leer la mente? no me sale explicarlo...
-No, quiero que me lo digas, nada de leer mentes- Se me iba a complicar enseñarle la filosofía jedi con Todrik al lado...- Decimelo como te salga.
No podía creer que le diera vergÜenza hablar y no que le leyera la mente que era mucho peor. Se quedó un rato callado, le di un rato para que empezara.
-¿Por qué se preocupa, Maestra?
-Porque no me gusta dejar las cosas sin resolver, ya lo sabés, y tu amigo Derlin me dijo que esta chica se iba a suicidiar, o algo así, así que prefiero averiguar que está pasando, y que algo así no tenga que pesar sobre tu consciencia.
-No se iba a sucididar, dice eso porque es una boluda, y no sabe como llamar la atención. Derlin dijo que era boluda porque no había conocido otra cosa en su vida y entonces se me ocurrió que venga a la orden, así conoce otra cosa ¿está mal?
-No, no está mal. Tampoco creo que sea una boluda. Todos en nuestra vida pasamos por malos momentos, unos reaccionamos de una forma, otros de otra.
-Lee, no me hagas explicarte, dale. Leé los mails.
Agarré el datapad, si no podía explicarlo mejor que yo los leyera. En los primeros mails Alex era muy amigable y tierno, pero ella le hacía ver que podía tener todos los hombres que quisiera, claramente con intenciones de dominarlo. Él de a poco fue cambiando de actitud y mostrándole muy tranquilamente que él no la necesitaba y que si lo iba a tratar así a él no le interesaba. Ella empezó a ponerse loca a medida que él le iba dando menos importancia. Le mandó fotos de ella
llorando, y en las últimas estaba sin ropa, me pareció una forma patética de llamar la atención.
-Ahora entiendo mejor, Derlin evidentemente no entendió nada.
-Dice Derlin que no la tengo que dejar de querer porque sea una boluda
-Eso es decisión tuya, no de él. La gente puede darte consejos pero la realidad es que nunca sirven, al menos no en esos casos. No conozco a esta chica, así que tratar de descifrar que es lo que quiere con esto me deja solo dos grandes opciones. La primera, te quiere usar, la segunda, cayó en su propia trampa, y te quiere de verdad. Como no sabe que hacer, para que no opines lo primero, empezó a hacer estas cosas, porque muy probablemente su madre, o la persona que es su tutor hace lo mismo.
-El problema, maestra, es que no sé si la sigo queriendo
-Es que no podés querer a alguien que no conocés, y evidentemente ella no te mostró su verdadera cara, o la mostró, y después la cambió ¿cómo podés querer a alguien que no conocés?
En los mails claramente se notaba el disparador del cambio. Ella le había dicho que todos los hombres morían por ella y él le respondió que la ayudó porque le pareció que era su deber. A partir de ahí Alex comenzó a responderle con frases jedi. La sacó de su lugar de importancia muy fácil.
-Ademas, ella no se va a suicidar
-Si ella se suicida, no va a ser por esto, si no por los diez mil problemas que debe tener.
-Maestra, ella no se va a suicidar
Lo dijo tranquilo y con toda confianza, casi con una sonrisa apacible.
-Ahora, si te voy a dar un consejo, que para algo soy tu maestra, y yo sí puedo hacerlo- me reí porque sabía que tampoco tenía autoridad, pero quizás pudiera servirle lo que iba a decirle.
Él sonrió.
Cuando te vuelva a pasar algo así, no escales el problema. No respondas, si no te interesa más contestarle solo agrava la situación.
Ahora, si sí te interesa, en ese caso es diferente.
-Sí maestra- dijo con su rostro feliz- En ese momento no sabía, y sentí que se lo tenía que decir, después le deje de hablar.
Era cierto, hacía varios días que no le respondía los mails.
-Si no le vas a hablar más, te recomiendo que no sigas leyendo lo que te manda. Puedo hacer que sus mails no te lleguen nunca si querés.
-Los últimos ni los leí, pero no, no la bloquees
-Está bien, eso es tu decisión. Solo quiero que me avises si tenés algún problema, nada más, Aunque parezca sin importancia.
-Está bien, por eso no te dije
-Sé que por lo general estoy ocupada, pero eso no significa que no tenga tiempo para que hablemos. Y además me gusta que me cuentes tus cosas.
Él sonrió.
-Pensé que tenías suficientes boludos con los tuyos como para fijarte en mis boludos... o boludas
-¿De donde sacás esas palabras? voy a tener que hablar con Todrik...
-¿Podemos pasar a algo importante ahora, maestra?- me señaló el sable.
Yo me reí.
-Bueno, supongo que podemos entrenar un rato... Quiero ver tu técnica, así que esta vez no te voy tapar los ojos.
Se paró tranquilamente y encendió el sable. Yo hice lo mismo y lo esperé. Iba a defenderme totalmente, quería saber en qué estaba fallando y qué tenía que mejorar para hacerlo entrenar eso.
Él me empezó a medir, pero se dió cuenta de que no podía entrar un golpe. El agarre era firme, la técnica bastante buena, no fallaba en lo básico. Lógicamente era algo falto de variantes, pero era lógico a su edad.
En un momento cambié mi postura defensiva a una ofensiva para ver como era su defensa. Lo hice de repente, sin avisarle. Mi ataque fue con todo, cuando le entró el golpe se desequilibró y cayó. No lo dañé, había frenado el ataque a tiempo para no lastimarlo, eso ya era fácil para mí. Trató de bloquearme, tuvo el reflejo, pero no llegó a hacerlo. Le agarré la mano para que se levante. Lo que hice después fue atacarlo a su nivel pero sin ser predecible, para que aprendiera
otras formas de ataque.
Con el correr del entrenamiento fue copiando algunos movimientos de los que yo hacía, justamente esa era mi intención. Todavía le costaba bloquear los golpes sorpresa. Después de un rato frené el ejercicio, no quería que piense que el entrenamiento conmigo iba a ser solo con
sables de luz.
-Me encanta tu sable nuevo. Por cierto, necesito que me devuelvas el mío.
Lo llevaba a la cintura también pero me lo entregó cuando se lo pedí.
-Ahora ya no lo necesitás
-No, ya tengo el mío
Iba a desarmar mi anterior sable ese mismo día, el cristal rojo que me había dado mi padre iba a servir para crear el talismán que me llevaría a los siths.

martes, 5 de julio de 2011

Hope: Pasado


Sable de Hope

Ya quedaba poco, teníamos que irnos, pero quería estirar el tiempo en Dantooine lo más que pudiera. La estaba pasando muy bien, y no quería que esos días terminaran, pero también sabía que pensar eso era una utopía. Había mucho que hacer, quizás después de eso, pudiera ir a descansar otra vez a casa, pero iba a pasar mucho tiempo antes de poder hacer eso. Nunca había sido lo mío la vida sedentaria, pero de vez en cuando me gustaba instalarme en un lugar y saberlo mi hogar. No había pensado eso desde que me había quedado sola… pero ahora sabía que todos siempre necesitamos un lugar donde volver, y ese era mi lugar. Alex estuvo bastante ocupado esos días armando su sable, traté de no interrumpirlo más de lo estrictamente necesario, era muy importante para él tener ese espacio, después iba a haber tiempo para hablar, y para entrenar… no le iba a hacer las cosas fáciles.

El recital de Ariella en Dantooine fue el más largo de toda su carrera, que si bien no era larga, contaba la no despreciable suma de siete años. Me dijo que su agente estaba pidiéndole una y otra vez que grabara el nuevo tema, ese que yo había sido la primera en escuchar y con el que había cerrado el show “Brilla una estrella por la Justicia”. No parecía realmente apurada por grabarlo y me pareció bien. No es que necesitara el dinero, y podía darse lujos como hacer esperar a su agente.

Había que definir algunas cosas antes de irnos, y una de esas cosas era pensar si le iba a decir a alguien o no lo que tenía pensado hacer. El talismán no iba a llegar a terminarlo, lo que excluía de las posibilidades al maestro Yndreed. Liz era otra posibilidad, pero no estaba segura de qué diría ella al respecto, creo que no le hubiera gustado que le dijera que tenía que mancharme con el lado oscuro… tampoco quería decirle a ella que le estaba ocultando información así a la orden. Soon tampoco era el indicado y menos aún Derlin… eso solo dejaba una posibilidad, y creí que tampoco iba a gustarle.

Fue al hangar, quería buscar el datapad de Clint, tenía que revisarlo, probablemente tuviera información allí que nos serviría. Buscar más temas musicales clásicos para Ariella fue lo que me dio la fuerza que necesitaba para decidirme a hacerlo. Lo encontré donde lo había dejado, en la caja donde estaban sus pertenencias.

Clint no había “aparecido” en el recital, pero yo tampoco lo había buscado… por primera vez me pregunté si era posible que no se hubiera ido en paz… si su unión con la Fuerza había sido en armonía… es cierto que él ya estaba preparado pero ¿era eso suficiente? además de que me había angustiado bastante pensar eso, me sentí culpable por no haber intentado buscarlo…

Revisé el datapad, había bastantes cosas, pero no había pistas, sí encontré mails de algunas personas que yo no conocía… Busqué archivos ocultos, encontré un archivo bastante grande, ocupaba casi el 60% de la capacidad del datapad. Solo yo o alguien con mis mismos conocimientos para hackear lo habría encontrado. Era el diario de Clint. La primer entrada estaba fechada hacía cuatro años. Allí estaban plasmados los últimos tres años de Clint, los tres últimos que habíamos vivido juntos.

Había imaginado que podía encontrar algo así, pero nunca lo había buscado… Iba a tener que leerlo aunque eso doliera, y mucho. En eso escuché que alguien tocó la puerta, abrí sin preguntar quién era.

Todrik me abrazó y me acarició la cara, estaba más tierno que de costumbre, no sabía precisar bien desde cuando, si desde el recital o desde antes, cuando dejé de tener miedo.

-¿Buscando más material inédito?
-Más que inéditos son temas viejos ¿querés que te ayude con la nave?
-No voy a rechazar esa invitación.
Me besó y yo le seguí el beso un largo rato.
-Tengo las herramientas por acá…
Me soltó y me dejó ir a buscarlas, mientras me decía:
-Falta muy poco, unos ajustes y estabilizar el hiperimpulsor que con los golpes del Basilisco quedo medio resentido. Ariella dijo que va a descansar y después se va a poner a grabar el nuevo single. Le dije que los haga esperar un poco más pero dice que quiere hacerlo. Probablemente empiece hoy mismo.
-Fui la primera en escuchar ese tema, es muy hermoso. Me dijo que lo querían grabar cuanto antes, pensé que los iba a hacer esperar un poco.
Me arremangué para empezar con el trabajo, en mis muñecas estaban las dos pulseras, la mía y la que había sido de Clint… Debí buscarlo en el recital, para saber al menos si estaba bien… aunque sabía que no había forma de saber si estaba en paz o no.

Me puse a reparar la nave, y me olvidé de eso por el momento. No tenía daños mayores, pero eran cosas que si no estaban bien podían molestar en vuelo, y más en los saltos. Lo principal ya estaba arreglado.
-¿Vamos a ir en mi nave?
-Supuse que lo ibas a proponer, esta es un poco apretadita para la "seguridad aumentada" que llevamos.
-Sí, pero tengo que informarte que no tiene tantas armas. Lo que si tiene es un motor auxiliar y creo que es más rápida que la tuya.
-Sí, eso reducirá los tiempos de viaje bastante. No creo que nos ataquen en el espacio. De hecho, con la tuya podríamos quedarnos aquí un par de días más, una semana incluso.
-Parece que te gusto Dantooine. No me vendría mal quedarme una semana más, todavía tengo algo que construir.
-Es un lindo planeta, lástima que está lleno de Jedis- dijo en son de broma.
Me reí del comentario pero después le dije seriamente.
-El talismán que voy a construir puede ayudarnos a saber donde están los siths pero...
-¿Pero?
-La forma de hacerlo puede traerme complicaciones...
-¿De qué tipo?
-Para acceder a la información, no se puede acceder si no uso el Lado Oscuro.
-ah, de ese tipo…
No parecía importarle demasiado ese asunto, desde el principio había sabido que él era la mejor opción para que supiera lo que intentaba hacer. Creo que en eso nos parecíamos, si había que usar el Lado Oscuro como medio para un fin, se usaba. Aunque para él siempre había sido fácil con Ariella al lado...
-Fijate ¿cuán hondo tenés que ir?
-No demasiado, pero quería que lo supieras solo por si acaso, el talismán puede usarse sin dificultad. El problema es que si no accedo de esa forma solo es un mapa más que puede grabar coordenadas de salto. Por eso no había información en la caja negra de la nave del sith, las coordenadas estaban en el talismán
-Entiendo ¿querés que te ayude?
-¿Con el talismán?
-Con la conexión- me miró muy serio- Si tenes que pasarte al otro lado.
-No sé si se podrá... no tendría sentido que nos manchemos los dos... y tendrías que aprender a tecnosincronizar primero.
-No te voy a acompañar, te voy a esperar de este lado. Puedo traerte de nuevo, lo sé porque lo he hecho. Son cosas que ustedes los Jedi consideran sacrilegio, pero vos no sos un Jedi ordinario.
-Está bien, me alegra habertelo dicho entonces, porque iba a hacerlo sola. Igual creo que podria volver, ya lo hice una vez, pero no quiero arriesgarme si no es necesario.
-Eso tendrías que verlo, yo sé que puedo ayudarte a volver, pero no sé para que te puede servir ir.
-No necesito estar del otro lado para ver el talismán, y creeme no quiero ir, pero soy consciente de que puede pasar.
-No sé si te entendí entonces, pero bueno, decime si me necesitas para algo
-El lado oscuro es solo otra forma de conectarse con la Fuerza, no soy una experta en el tema pero cuando sincronicé con el talisman sith sentí la mancha del lado oscuro en mí. Eso no es lo mismo a estar del otro lado del todo. Hay que cruzar la barrera para eso. Pero no es necesario cruzarla para leer la información. Perdón si no lo estoy explicando bien, no es tan fácil describirlo.
-¿Y para que el talismán te de toda la información que maneja debes cruzar del todo?
-Creo que no es necesario- aunque la realidad era que no estaba segura.
-Si es solo mancha, no es demasiado problema.
-Supongo que no será más que eso, lo voy a saber cuando lo haga.
-Bueno, de todos modos, avisame cuando lo hagas.
-Sí, te voy a avisar.
-Quiero vigilar lo que pasa y estar allí por si me necesitas.
Dejé las herramientas y lo abracé, él se rió un poco de mi reacción y me abrazó fuerte.
-Voy a estar bien
-Claro que sí, me aseguraré de eso.
Lo besé otra vez, eso que me había dicho era muy tierno. Me gustaba saber que no estaba sola y que él me iba a proteger para que no me pasara nada.
-Creo que tu amigo Loch nos puede ayudar con el asunto del stealth y los escudos de la nave.
-Sí, es bastante bueno en lo que hace, trabajó para Revan
-Entonces le voy a pedir que nos ayude con eso, aunque no me gusta mucho que otros toquen a mi bebé.
Se rió bastante.
-Es lógico.
Me volví a poner en cuclillas para seguir reparando la nave y Todrik me empezó a ayudar. En un momento me alcanzó un datapad y me dijo:
-Eso son las especificaciones que pide el seguro de la discográfica para la nave
-Parece que solo va a haber que comprar algunas cosas.
-Si tenés el hiperimpulsor que decís, hay tiempo. Este planeta, pese al ataque masivo, probó ser moderadamente seguro. Lo que me preocupa es...
Y me señaló un link en el datapad. Era una publicidad del recital de Ariella, parecía que su popularidad se estaba incrementando a niveles exponenciales. Hablaba maravillas y decía que las ventas habían aumentado todavía más. Había fotos de los jedis en el último recital y decía algunas pavadas sobre eso.
-Bueno, suerte que pedi seguridad extra. No te preocupes, vamos a poder identificarlos antes de que lleguen a nosotros, y no saben que los vamos a estar esperando, lo que nos da bastante ventaja. En cuanto a otros problemas “no siths” serán más fáciles de manejar, también puedo trabajar con burócratas si es necesario, estoy acostumbrada por la orden.
Él se empezó a reír.
-Claro, ¿nunca te conté sobre mi trabajo en Ungul y mi negociación con los del sindicato de Czerca? Después se quejan que somos pocos jedis, y nos mandan a hacer esas cosas...
-No sé bien que tienen en la cabeza
-Yo tampoco. Me la pase viendo balances y cobrando deudas.
-Y ahí te conocí- se rió.
-No había sido mi mejor día- me reí con él- Y como si fuera poco viniste diciendo que tenías las cosas del sith que habías matado.
En ese momento estalló en risas.
-O sea, ese era mi trabajo, no ver balances...
-Bueno, perdón
-No es tu culpa, fue cuando me empecé a replantear muchas cosas.
-Veo que caí en un momento muy particular... ya me parecía, en cualquier otro momento me hubieras mandado a volar, no?
Me besó.
-Te mande a volar, pero conseguiste mi mail
-No me rindo tan fácilmente
-Sí, lo noté, en especial cuando seguiste insistiendo a pesar de que no te deje usar la Fuerza por un día entero.
-No me iba a morir por eso, fue divertido
-Creo que para mí lo fue más- me reí.
-Prefiero hacer reír que hacer llorar
Eso me sacudió un poco, más de lo que debería y mucho más de lo que me hubiera gustado…
Me quedé sin decir nada, y continué trabajando en la nave, aunque supongo que se notaba el cambio en mi cara, él no dijo nada.
Un silencio incómodo invadió el hangar, aunque él no parecía estar incómodo.
-Nunca me hizo llorar.
-Pero lloraste cuando se fue
-Sí, pero no fue su culpa
-Nadie dijo que tuviera la culpa
-Fue culpa mía
-¿Por qué decís eso?
-Yo no pude protegerlo. Porque yo fui la que decidió.
-¿Qué decidiste? no entiendo, ¿estuviste ahí... cuando sucedió?
Me miró preocupado.
-Sí, estuve ahí, vi cuando lo mataron- Hice una pausa, no era fácil hablar de eso. Todrik puso cara de sorpresa, supongo que no se imaginaba algo como eso en mi pasado- Clint era una especie de doble agente, yo no lo sabía. Estábamos en una misión de rutina hasta que apareció un sith, después de años de no ver uno. Clint quería ir solo, pero no lo dejé. Cuando llegamos a las cuevas que habíamos encontrado le entregó a su maestro un holocrón, ni siquiera sé si era su maestro
o solo un superior... con eso el sith pretendía traer a una especie de criatura oscura, no sé lo que era. Me dijo que decidiera entre abrir el holocron y la vida de él.
-¿Y él que hizo? ¿Por qué tenias que abrirlo vos?
Me costaba bastante hablar, era un asunto que no le había contado nunca a nadie, ni siquiera a la orden.
Él me abrazó. Hablar sobre eso fue como volver a revivirlo… y dolía, todavía dolía demasiado.
-No sé bien qué estaba haciendo él en ese momento, yo estaba en shock. No sé por qué quería que yo abriera el holocrón, son respuestas que no tengo y que nunca quise saber, tampoco me importaban... Decidí que no podía abrir el holocrón, que no podía desatar esa cosa que el sith
estaba por traer. Él lo atacó cuando no respondí, intenté ayudarlo, pero no llegué a tiempo.
Era consciente de que me estaba aguantando para no llorar, Todrik no tenía por qué soportar eso, y aún así, me estaba escuchando.
-El sith lo mató frente a mis ojos, sabía que yo lo amaba... Lo odié como nunca voy a odiar a nadie más, y me encargué de que abandonara la existencia, pero ya no importaba, porque Clint estaba muerto.
No pude contener más el llanto, el dolor era muy grande, la herida que creí que estaba cerrada se volvió a abrir…
-Hiciste lo que pudiste, esos tipos son unos demonios.
No dijo más nada, solo me abrazó y me dejó llorar, el tiempo que fue necesario. Pasó un rato hasta que pude calmarme.
-Perdoname- le dije
-¿Por qué?
-No sé por qué terminé hablando de él y terminé llorando...
-Está bien, eso no es razón para pedir disculpas
-Nunca le había contado esto a nadie... la orden no sabe nada tampoco... esa fue la primera vez que les mentí, no quería que su nombre quedara manchado
-Entiendo, no te preocupes, no saldrá de mi, además, yo te presione para que hables.
Me abrazó de nuevo, y yo me dejé abrazar, la herida dolía menos si me abrazaba. Me sequé las lágrimas pero todavía seguía ahí la tristeza.
-Algún día te ibas a enterar
-Debe haber sido horrible. Lamento no poder hacer más que escucharte.
-Está bien, ya lo dejé ir... aunque a veces me pregunto si estará en paz...
Volví a agarrar las llaves y continué con la reparación de su nave.
Eso me distraía, me hacía olvidarme por el momento de la tristeza.
-Supongo que no hay forma de saber eso
-No, no la hay
Una vez más nos invadió el silencio.
-No fue fácil al principio, Alex me ayudó mucho. Después supe que no había más opción que seguir adelante, y dejarlo ir…
-Supongo que la experiencia del otro día no ayudó demasiado.
-Lo del otro día no tenía que ver con él, o quizás sí, pero no directamente...
-Me refiero al recital, y a la ........gente...que viste
-No lo vi, y no lo busqué tampoco... Pero hoy me empecé a preguntar si estaría bien... si realmente estaba en paz... No sé qué me pasa, creí que lo había superado pero... quizás nunca lo haga.
-Lo harás cuando estés lista, no antes.
En ese momento vi llegar a Ariella que se metió adentro de la nave, no parecía tener buena cara. Lo miré a Todrik, como preguntándole si iba a ir a ver él qué le había pasado.
-¿Querés ir vos? por ahí te distrae un poco de paso...
-Sí.
Me levanté y lo besé.
-Gracias- me dijo. Y yo no entendí qué era lo que me estaba agradeciendo…
-¿Por qué decís gracias? Yo tendría que decirte eso a vos...
Lo abracé. Me abrazó y me dio un beso en el pelo.
-Porque te conozco hace menos de dos meses y ya no sé cómo hacía antes para vivir sin vos.
Esa frase me enterneció hasta lo más hondo. Era lo más lindo que me había dicho desde que lo conocí… claramente nuestra relación ya no era lo mismo que antes. Lo besé y él me acarició la cara y me limpió las manchas de grasa que me habían quedado de lo que había estado trabajando.
-Voy a ver a Ariella, espero que esté bien. Cuidame las herramientas.
-Yes, My Master.
Lo escuché reír mientras me alejaba. Entré a la nave y busqué a Ariella.
-Ariella soy yo...
En la nave había una especie de consola de edición bastante buena. Pensé que si usábamos mi nave íbamos a tener que trasladarla. Ocupaba dos habitaciones en total, pero no era problema, mi nave era lo suficientemente grande. Una habitación era la consola y otra la pecera.
Ariella tenía puesto los auriculares, y estaba concentrada grabando.
Me quedé escuchando sin interrumpirla. Parecía nerviosa y si no había percibido mal, estaba trabajando para poder olvidarse del asunto. Yo también hacía lo mismo.
Me vio y se sacó los auriculares.
-Hope, perdoname, ¿necesitas algo?
Me acerqué y me senté cerca de ella.
-Solo quería saber si estabas bien.
Estaba vestida con la ropa que usaba para salir al escenario, bastante más sexy que su costumbre. Apagó la consola y se sentó conmigo.
-Derlin me dijo que le gusto.
No parecía mal, pero sí incómoda.
-Bueno, al menos no parecés estar mal
Sonreí y ella se rió.
-Pero él sí, calculo. Y no sé, no me gusta ponerlo mal… Pero no quiero meterme en nada de eso ahora- y como si lo dijera para ella misma dijo- o nunca
-¿Por qué? Aunque quizás primero deba preguntarte si te gusta él o no.
-No sé. No quiero decidirlo ahora.
Seguía incómoda, y me lo dijo casi mal, aunque la voz siempre sonaba angelical. Se acomodó el pelo.
-Entonces no tenés de que preocuparte, solo tenés que esperar hasta estar segura. Si él realmente está interesado en vos, te va a esperar.
Me miró, casi con rabia.
-NO QUIERO tener que pensarlo ¿entendes? no quiero tener que decidirlo, apenas lo conozco, pensé que podíamos ser amigos.
Nunca la había visto así.
-¿Le dijiste a él lo que te pasaba?
-Le dije que no le podía contestar, y me agarró la mano y me abrazó, y yo me quería ir a la mierda.
Esas eran palabras de Todrik.
-Tranquila- me senté a su lado.
Ella me miró y me dijo:
-Canto canciones de amor, la gente se enamora cantando mis canciones, y yo ni siquiera sé si alguien me gusta o no y me pone nerviosa tener que decidirlo.
-Eso es lo que está mal, no tenés que decidirlo.
-Soy un fraude
-Claro que no lo sos... Eso no tiene nada que ver.
-¿No? canto de cosas que nunca me pasaron, de la pobreza, de la guerra, Y A MI NUNCA ME PASO ENTENDES
En ese momento se puso a llorar, quebró en una milésima de segundo. La abracé para contenerla y le dije:
-Eso no es verdad, pasaste por cosas peores que esas, las mujeres cuando pasamos por cosas así, nos volvemos más fuertes.
Dejé que llorara sobre mi hombro, era raro, hace poco era yo la que estaba llorando, y ahora ya tenía la fuerza para contenerla a ella.
-Hay mucha gente que dice eso de mi, que canto sin saber, que digo cosas que le escuché a otro.
-Eso no es verdad, que no hayas vivido algunas cosas de las que cantas no significa que no lo puedas entender, vos entendés a las personas, lo que sienten y piensan, y eso lo volcás en tus canciones. Vos sabes ver en el corazón de las personas. Ya llegará el día en que puedas ver en tu propio corazón.
-Pero no tengo el valor de tomar decisiones yo misma
-¿Qué desiciones?
Se estaba refiriendo a Derlin, no había duda.
-No es una cuestión de decidir, es una cuestión de sentir- le dije sinceramente.
-Pero si le digo que no él va a estar mal
-No va a estar mal. Solo dijo que le gustás, nada más, eso significa que quiere conocerte más y de otra manera, no significa que te ame. El amor no es algo que se forma de un instante al otro, es algo que lleva tiempo forjar. Además, antes de preguntarte eso, deberías preguntarte si vos vas a estar bien. El amor siempre es de dos partes, de una sola no es amor.
Me miró y me sonrió, yo le acaricié el pelo.
-Así que primero tenés que preguntarte qué querés vos
-¿Y si ahora no me lo quiero preguntar?
-Si ahora no te lo querés preguntar significa que no es el momento.
Ella asintió con la cabeza y me abrazó.
-Mucha gente me avanzo antes, pero era más fácil sonreír y decir que no
-Quizás en el fondo no quieras decir que no, pero todavía no estés lista para decir que sí. Así que no te presiones, si las cosas se tienen que dar se van a dar, tarde o temprano. Y mientras tanto, que Derlin espere- le sonreí.
Ella se calmó, aunque no estaba del todo bien. Claramente estaba mal porque no quería lastimarlo, pero tampoco quería decirle que sí por el momento.
-Voy a preparar un té para cuando termines de grabar
-Gracias Hope
-Y encontré más temas para darte, pero este datapad no te lo puedo regalar, así que voy a hacer una copia
-Gracias otra vez, se encuentran tesoros en esos datapads
Parecía que eso ya la había hecho olvidarse de Derlin, al menos por un tiempo.
-Si llego a encontrar más estos días te los doy. Hacés maravillas con los clásicos.
Me sonrió y no dijo más nada. Salí para que se distrajera haciendo lo que más le gustaba, cantar. Todrik estaba en la puerta de la nave, cruzado de brazos
-¿Quién va a morir hoy?
-Nadie, vamos, le voy a preparar un té para cuando termine de grabar.
Lo agarré de la mano y lo llevé para la casa. Antes de ir a la cocina me saqué el mono de trabajo y me lavé las manos, después fui a preparar el agua para el té.
Poco después llegaron Alex y Derlin.
-Buenos días
Todrik tenía cara de Poker, pero yo sabía que se estaba controlando para no saltar.
-Buenos días- saludaron ambos.
Derlin miró a Alex y él se adelantó para decirme.
-Maestro, terminé mi sable.
-¿En serio? Bueno, felicitaciones, sos formalmente mi padawan. Tu premio será un té.
Me lo mostró sin encenderlo y la verdad es que me gustó mucho.
-Me gusta mucho.
Él lo miraba orgulloso.
-Vas a tener que probarlo, lo vamos a probar después de tomar el té.
Alex asintió. Todrik parecía de bastante mal humor… esperaba que no le hiciera un sermón a Derlin o algo peor.
Derlin se sirvió una chocolatada, ese chico podría tener veinte años, pero para mí tenía bastantes menos.

Hope: Lugar


Gracias a la maestra Vyslin había logrado aprender a forjar monofilos en poco tiempo, mi disco nuevo con el cristal Nextor parecía tener el balance correcto. Justo estaba practicando en el jardín cuando escuché una nave que se acercaba a casa.

Varias horas antes del recital de Ariella llegaron los amigos de Todrik. Bajaron de la nave una mujer rubia, no portaba sable de luz, pero claramente era Force User, su nombre era Alsh Cynems. Un Twilek que traía un maletín y una mochila bastante grande (supuse que llena de armas) y un Dug que tenía un disco a la cintura.

-Maestro.

Así que ese era el maestro Zeison Sha de Todrik...

-Bienvenidos a mi casa, soy Hope Louise.

El maestro de Todrik me miró cuando el disco regresó a mi mano pero no dijo nada, solo se presentó. Me gustaba bastante la forma liberal de ser de los Zeison Sha…

Mientras Todrik se abrazaba con la chica rubia, más efusivamente de lo que me hubiera gustado, saludé al maestro de Todrik y al Twilek que se presentó como Loch’Ulara.

Los hice pasar y les dije que se sientan como en su casa. El living todavía era un total desorden así que los llevé a la biblioteca. Los tres parecían buenas personas o eso me pareció a simple vista sin conocerlos.

No tardé mucho en mostrarle a Loch el aparato que habían usado los clones para comunicarse entre sí, y que pensaba llevar por si acaso aparecían.

El Twilek me lo pidió prestado a lo que le aclaré que lo quería de vuelta. Me dijo que me lo iba a entregar antes de que nos fuéramos.

Cuando estábamos saliendo me entregó el dispositivo y un ESM que había creado. Era un sistema pasivo de contramedidas que captaba transmisiones de cierta frecuencia. Las naves militares lo tenían para saber cuando los estaban detectando en el radar. Nunca había visto uno tan pequeño, pero creí que podía hacer uno sin problemas. Era justo lo que necesitaba para la nave, lo que necesitaba para pasar del stealth al escudo, ya le iba a pedir eso después.

Nos dirigimos bastante temprano hacia el lugar del show, el encargado de todo iba a ser el maestro de Todrik: Brogus Dell. Me puse a sus órdenes enseguida y esperaba que alguno de los chicos me respondiera si venían a ayudar o no mientras hacía reconocimiento de todo el lugar. No quería que se me escapara ningún detalle. El perímetro estaba marcado pero no había tribunas de ningún tipo, solo campo.

-Hola Hope.

-Hola Liz ¿cómo estás? ¿cómo la pasaste en tus vacaciones?

-Estuvieron geniales, la pasé bárbaro.

-¿Venís al recital?

-Sí, en un rato salgo para allá. Después tengo que hablar con vos sobre algo...

-Algo me dijo Derlin… ¿volvió Tesa?

-No, no es Tesa... pero no hablemos de esto ahora. Ya vamos a tener tiempo.

-Está bien, te espero.

El único de mis compañeros en hacerse presente para ayudar con la seguridad fue Soon. Le pedí que estuviera atento al perímetro que yo iba a estar en el centro del campo para tener más rango e identificar a algún clon que podría haber quedado dando vueltas. Dijo que estaba de acuerdo y fuimos a avisarle a Brogus Dell que era el encargado de la organización, aunque el que nos iba a linkear a todos iba a ser Todrik desde atrás del escenario.

Soon quiso saludar a Ariella y no lo interrumpí no me pareció apropiado si quería hablar con ella. Me quedé viendo a Alsh y a Loch que se encargaban de cachear a los músicos pero a su vez estaba pendiente de las expresiones de Ariella y la que puso en ese momento no me gustó nada, enseguida lo llamé a Soon.

-Soon, te necesitamos acá.

Me acerqué a Ariella y le pregunté:

-Él es un amigo mío espero no te haya molestado.

-No, solo se quiso meter en mi cabeza...

-No te preocupes, yo me encargo, nadie va a hacer eso.

Le dije a Soon que mejor se encargara de hacer lo que le dije y le aclaré que de ese asunto en particular ya se iba a encargar otra persona. No me arrepentía de haberlo llamado, pero casi.

Cuando todo estuvo listo fui a saludar a Ariella, todavía seguía probando sonido.

-¿Está todo bien?

-Sí.

-Te voy a estar viendo desde el campo- le sonreí.

Ella me abrazó, estaba muy contenta. La abracé.

-Nos vemos después.

Me alejé hacia el campo, ya había mucha gente, no recordaba haber visto nunca tanta gente reunida en un mismo lugar para escuchar cantar a alguien.

Agradecí que lo que le dijo Soon no le afectara más allá de una mala expresión en ese momento. Era increíble, este chico solo quería ayudar, pero en vez de ayudar complicaba siempre las cosas…

Tomé mi lugar en el medio del campo, parecía que todas las precauciones que habíamos tomado eran innecesarias y eso me alegró, no había nada extraño, no había más clones o no aparecieron. Quizás era imposible que en un recital de Ariella pudiera aparecer un sith, pero las precauciones nunca estaban de más.

-Maestra Hope

-Hola Derlin.

-¿Puedo pasar a saludar a Ariella?

-Llegas algo tarde, yo la saludé hace una hora y fui una de las últimas.

-Está bien maestra, la saludaré al finalizar el show.

El recital fue algo que jamás vi en mi vida. Ariella abrió el show con el tema que me había prometido y la gente estalló, era increíble como su voz podía levantar a todos a la vez y no parecía haber ningún tipo de alborotadores que quisieran armar desastres como suele haber en esos recitales, sino que todos estaban cantando con ella o bailando... pero eso no fue tan increíble como la llegada de muchas personas que se iban acercando para curarse de sus enfermedades o dolencias. Soon los vio desde arriba en su basilisco, yo los vi desde el campo.

En un momento empecé a sentir algo que nunca había sentido, eran espíritus, muchos, y se los veía en la Fuerza.

-Todrik, ¿esto es normal?

-Ponele…

Los espíritus comenzaron a acercarse a las literas de los enfermos y los curaban. Cada vez había más. En Dantooine habían muerto muchos, y parecía que todos los jedis se habían congregado ahí…

-Ok, esto sí que no es normal- dijo Todrik.

-No parece malo- lo tranquilicé.

Era algo jamás visto. Fue en ese momento cuando creí realmente lo que había leído ese día en los diarios, antes de conocerla... En un momento supe que los jedis que estaban escuchándola, jovenes de no más de veinte años, habían empezado a enviar comunicados a la Orden con lo que estaba pasando. Traté de frenarlos, pero no había forma de frenar todas las comunicaciones a la vez. La orden se iba a enterar de lo que hacía esa chica, iban a querer "protegerla". Decidí que mi lugar ya no estaba más allí y me dirigí hacia atrás del escenario donde estaba Todrik. Si la Orden quería llevársela, iba a tener que pasar sobre mi cadáver.

Todrik me abrazó por el cuello y le dije:

-Perdón, traté de frenarlo pero no hubo forma de que no se enteren.

Me quedé tranquila cuando vi que detrás de todo el consejo aparecía el maestro Yndreed. En ese momento sentí que el holocrón vibró en mi bolsillo y se encendió solo. Vyslin se había puesto a bailar en el medio del campo. Incluso vi como algunos la sacaron a bailar, hasta que llegó a ella el maestro Yndreed y bailaron juntos... me pareció tan hermoso, lo más hermoso que podría haber hecho la voz de Ariella esa noche. Después de que bailó con ella, apagó el holocrón y me lo devolvió, escuché en mi mente que me decía

"Sigue siendo un préstamo"

"Gracias maestro".

Me puse a bailar con Todrik, como toda la gente que estaba abajo del escenario, que por cierto era mucha gente, pero no había signos de ningún problema, todos se estaban divirtiendo. El show estaba planeado para durar tres horas y duró cuatro, cuando Ariella volvió a cansarse por segunda vez. Obviamente Todrik se encargó de eso ambas veces. Ella estaba como nueva cuando nos fuimos y tenía una sonrisa radiante en su rostro.

No solo se había hecho presente el consejo, que agradecí no vinieron siquiera a hablarme, sino que también hubo algunos indeseables.

Cuando vi que Draay miraba hacia el escenario, en especial hacia mí, no dudé en bajar para hablarle, mejor dicho, para dejarle bien en claro como eran las cosas, y como lo iban a seguir siendo.

-Necesita algo caballero Draay.

-¿Sabes lo que estás protegiendo no?

Lo miré con cara de que me estaba preguntando algo totalmente obvio.

-Sí- fue mi única respuesta.

Se marchó sin más, y esperaba no volver a verlo en lo que me quedara de vida, pero estaba segura de que no iba a tener tanta suerte...

Liz me llamó al comunicador y me dijo:

-Hope, ¿hacen algo después del show? ¿o va a ser privado?

-Esperame en segundo- lo miré a Todrik y le pregunté- ¿Vamos a casa?- Ante su afirmación le respondí a Liz- Vamos para mi casa.

-Ok, ¿voy para allá o los espero?

-Esperanos, ya vamos para allá.

Aunque después me avisó que se iba con Derlin, que aparentemente había cancelado algo por el camino.

La reunión que tuvimos después del show en casa se prolongó hasta altas horas de la madrugada, algunos tomaron alcohol, otros tomamos té. Todos la pasamos muy bien, incluido Soon. No sabía lo que nos deparaba este viaje, no sabía si todos íbamos a ir o no, pero lo que sí sabía era que en ese momento no hubiera estado en otro lugar más que allí, ese era mi lugar, al lado de ellos, y jamás me había sentido tan bien. Cuando todos ya se habían ido le dije a Todrik:

-¿Venís conmigo o te vas con Alsh? Si no hacés algo Liz te la va a quitar…

Como respuesta me abrazó y me llevó volando, cuando hice amague de protestar me besó para que no lo hiciera.